Juicio Procés

Diplocat rechaza que el encargo a la supuesta observadora internacional fuese una “misión de observación electoral”

MADRID
SERVIMEDIA

El secretario general del Diplocat, el órgano de la Generalitat para promover la acción en el exterior, Albert Royo, declaró este miércoles como testigo en el juicio del `procés´, donde rechazó que el encargo a la supuesta observadora internacional Helena Catt fuese una “misión de observación electoral”, sino que fue, dijo, un “proyecto académico” sobre la relación entre Cataluña y España.

Estas fueron las explicaciones del exresponsable de Diplocat durante su declaración como testigo ante el tribunal que juzga el ‘procés’ independentista de Cataluña. Royo explicó en varias ocasiones, ante las preguntas de la Abogacía del Estado y de las defensas, que el encargo que se realizó a Helena Catt fue un “proyecto académico” sobre la relación entre el Gobierno de Cataluña y el de España, “sabiendo que la relación sería complicada en los siguientes meses”. Los analistas académicos tenían “total autonomía” porque el trabajo tenía que ser “intachable científicamente”.

En este sentido, expresó que las únicas indicaciones que Diplocat realizó estaban orientadas a que los expertos realizaran una “diagnosis de lo que pasaría esos meses en Cataluña” y que, para ello, recomendaron contactar tanto con el Govern de la Generalitat como con el Gobierno central. “Me consta que pidieron reuniones con ambos”, subrayó, ya que el objetivo era obtener un “marco general” del contexto político.

Preguntado por la perspectiva de la celebración del referéndum, ya que como explicó el proyecto se diseñó entre mayo y junio y se desarrolló entre julio y octubre, Royo manifestó que era “evidente” que “una de las cuestiones políticas más relevantes de esos meses es si habrá voto o no”; por eso, reiteró, “para ser lo más rigurosos posible, decidimos el encargo de este proyecto sobre la relación entre Cataluña y España”. Asimismo, agregó, “ese proyecto se hubiera hecho igual aunque no hubiera habido referéndum”.

Posteriormente, el exresponsable de Diplocat rechazó que se tratase de una “misión de observación electoral”. Así, añadió, “no tiene nada que ver, ya que por definición este tipo de misiones las organiza y financia una entidad que no sea del territorio”. De hecho, continuó, “quien lo organiza suelen ser grandes organizaciones internacionales”. El trabajo que Diplocat encargó, explicó, “era un proyecto académico, que por objeto no puede validar ningún voto” y que "tendría lugar independientemente del referéndum”, reiteró, negando así que los analistas actuaran en calidad de observadores internacionales.

Sobre la celebración por parte de Diplocat de algún encuentro entre el 29 de septiembre y el 2 de octubre con los expertos, Royo negó haber celebrado alguna reunión o visita durante esos días, a pesar de haber acordado este tipo de encuentros para otros proyectos. “Eran totalmente autónomos a la hora de organizarse”, manifestó. Además, indicó que “esta gente no vino expresamente el día 29, esta gente estaba trabajando desde hacía semanas o meses, trabajaban desde Barcelona o desde sus centros”.

En relación a las visitas de parlamentarios europeos, el exresponsable de Diplocat explicó que la entidad en ocasiones ofrecía pagar los gastos, pero “dependía de cada caso”.

La declaración como testigos de los supuestos observadores internacionales Helena Catt y Paul Sinning estaba prevista esta tarde, pero finalmente el tribunal las ha retrasado al miércoles 27 de marzo, de modo que no habrá sesión esta tarde y el juicio se reanudará mañana a las 10.00 horas.

(SERVIMEDIA)
13 Mar 2019
ICG/SGR/caa