Con motivo de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la organización propuso la implantación de una asignatura obligatoria de educación sexual integral, adaptada a cada grupo de edad y en todos los niveles educativos, para “contribuir” a erradicar este tipo de violencia y “acabar” con la “discriminación de género” que sufren estas menores.

Save the Children también destacó el aumento de las denuncias entre adolescentes, ya que, del total de 28.987 hombres denunciados en 2017 por violencia de género, 127 eran menores de edad, cifra que supone un aumento del 18,7% respecto a 2016.

Por este motivo, Ana Sastre, directora de Sensibilización y Políticas de Infancia de Save the Children, abogó por la puesta en marcha de herramientas con las que “poner fin” a la desigualdad de género y a la “creciente” violencia machista contra las niñas y adolescentes.

“Los políticos deben comprometerse a aprobar en la próxima legislatura la Ley para la Erradicación de la Violencia contra la Infancia, en la que se incluye la implantación de una asignatura de educación afectivo sexual y medidas concretas para los niños y niñas víctimas de violencia de género”, subrayó.

Asimismo, la organización pidió que los centros educativos cuenten con planes de prevención y formación, así como con protocolos de detección e intervención para profesores sobre todas las formas de violencia que puedan sufrir sus estudiantes, como el acoso, el abuso sexual o la violencia machista. “Debemos empoderar a las niñas y formar a los niños y niñas para que, cuando crezcan, puedan entablar relaciones positivas, sanas, igualitarias y libres de violencia”, afirmó.

La Ley de Violencia contra la Infancia también incluye una serie de medidas dirigidas a erradicar todos los tipos de violencia machista que sufren las niñas por el hecho de serlo, como la mutilación genital femenina, el matrimonio infantil o la trata para la explotación sexual.

Save the Children advirtió, además, de que la discriminación de género tiene un “grave impacto en el avance y desarrollo de la sociedad, representa un obstáculo para lograr que todos los niños y niñas tengan el mismo derecho a sobrevivir, aprender y vivir una vida libre de violencia”.