Merco, que evalúa la reputación de las empresas desde el año 2000, sitúa al Grupo Social ONCE al frente de la clasificación de este informe en su edición de 2018, repitiendo el puesto logrado ininterrumpidamente desde 2015 en este ranking que incluye a un total de 100 empresas.

Al igual que el primer puesto de Grupo Social ONCE, también se mantienen en los mismos puestos que en el informe de 2017 Mercadona, en segunda posición; Inditex, en el tercer puesto; CaixaBank en el cuarto, y Mapfre en el quinto.

Tras este primer grupo se sitúa Iberdrola en sexta posición, subiendo un puesto respecto a 2017, que coincide con la caída de BBVA del sexto puesto en 2017 al séptimo en la nueva edición. En octava posición se mantiene Repsol, seguida de Telefónica, que sube desde el decimotercer puesto de 2017, y de Ikea, que pierde una posición y cierra los diez primeros puestos. Los cinco siguientes puestos corresponden a Santander (11º), Danone (12º), Mutua Madrileña (13º), Mahou San Miguel (14º) y Leroy Merlín (15º).

El director general de Merco, Manuel Sevillano, destacó en declaraciones a Servimedia que la responsabilidad social corporativa juega un papel fundamental en la reputación de las grandes empresas, hasta el punto de funcionar como un elemento de diferenciación competitiva entre unas y otras. “No puede haber empresas sostenibles en sociedades que no sean sostenibles”, aseguró, añadiendo que “las empresas son corresponsables de lo que pasa en su entorno”.

Así, resaltó la correlación existente entre el ranking de RSC y el de reputación de empresas que también elabora Merco. En este sentido, Sevillano destacó que las grandes empresas tecnológicas como Google y Apple, que aparecen en puesto altos de la clasificación de reputación, “flojean” en la de responsabilidad social corporativa.

“DECIR POCO Y HACER MUCHO”

En cuanto al liderato durante cuatro años consecutivos del Grupo Social ONCE, Sevillano destacó la “vocación” de este grupo “que por su propia razón de ser es lo que más valora”. “Ha hecho de la RSC su propósito corporativo”, añadió.

Además, Sevillano subrayó la importancia de distinguir entre imagen y reputación, señalando que la primera se basa en la comunicación, mientras que la segunda lo hace en “hechos tangibles y comprobables”, sobre lo que agregó que “la RSC es más de hacer que de decir”. Así, destacó la necesidad de “mantener una coherencia entre lo que se dice y lo que se hace”, por lo que recomendó “decir poco y hacer mucho”.

Para realizar esta clasificación el informe recoge las valoraciones de 806 expertos pertenecientes a sindicatos, analistas financieros, periodistas de información económica, ONG, expertos en RSC y asociaciones de consumidores, entre otros, además de las respuestas de 1.173 directivos de empresas con facturación superior a 50 millones de euros y las valoraciones de 5.436 ciudadanos.

Entre las variables valoradas, se encuentran el compromiso social de las empresas, su responsabilidad con los empleados, contribución a la comunidad, ética, transparencia, compromiso ecológico y el atractivo para trabajar en ellas.