Así se pronunció en una entrevista en TVE recogida por Servimedia, donde enfatizó que sale “a ganar y no a empatar” en los próximos comicios. “Es que no contemplo otra opción que ganar estas elecciones, por eso las pedíamos”, trasladó el presidente de los populares.

Defendió que “en absoluto” es lo mismo votar al PP que a Vox. “Quien quiera imitarnos, bienvenido sea, pero el partido original es el PP”, indicó el líder de la oposición, refiriéndose a los cuarenta años de trayectoria de su formación en España.

Valoró que los partidos que no han tenido experiencia de gestión y tienen “falta de trayectoria” acaban pidiendo “cosas que son imposibles”. Habló en este punto de la petición de Vox de suprimir las autonomías y de la sugerencia de Ciudadanos en su momento de hacer lo mismo con el Senado.

En todo caso, recalcó que la inconstitucionalidad de los partidos ha de medirse en su actuación y se mostró sorprendido por el hecho de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hable de que Vox es “inconstitucional” cuando en su caso “ha estado pactando” con los partidos independentistas, que “quieren la confrontación civil y la independencia de Cataluña”, y con Podemos, “que ha asesorado a Venezuela en su ruina absoluta”.

Dejó claro que mostrará su oposición en cuanto “uno de esos partidos” nuevos “se escape de lo que es la Constitución” por “dogmatismos en sus ideas”. En este punto, valoró que los españoles que salieron a la Plaza de Colón para manifestarse contra la gestión de Sánchez con respecto a Cataluña “quieren que vayamos a las urnas juntos”.

DISPERSIÓN DEL VOTO

Para el líder del PP, “no tiene sentido que haya dispersión de voto en las urnas que haga que los restos de provincias pequeñas acaben en manos del PSOE o Podemos”. Esta explicación le sirvió para presentar al PP como la única “alternativa” a Sánchez y el partido que debe “liderar” cualquier posible acuerdo en el centro o en la derecha.

Recordó que la cúpula de Cs ha dicho ya públicamente que no pactará con Sánchez tras los comicios generales del 28 de abril. “Quiero creérmelo…”, comentó, escudándose en los vetos previos anunciados por los de Albert Rivera que “no cumplieron”, tanto en el caso de Pedro Sánchez como el de Mariano Rajoy.

Hizo especial hincapié en que con la irrupción de los partidos “nuevos” en los últimos años se ha podido comprobar que “ese multipartidismo no da más estabilidad”, sino “al revés”. Y, si los españoles “quieren más estabilidad”, recomendó que piensen en el “voto fuerte” de un partido “de centro, moderado, liberal” y que “puede pactar a la izquierda y a la derecha”.

Hizo esta llamada al voto suficiente al admitir que “no sabemos muy bien si va a haber mayorías de gobierno” tras el 28 de abril que doten de estabilidad al país. Para contraponer el modelo del PSOE y del PP, Casado pidió un ‘cara a cara’ con Sánchez para que los españoles vean “a los dos candidatos que pueden ser presidentes del Gobierno” y así facilitar su decisión.

Por último, negó que el PP haya sufrido “desgaste” desde que se hizo con las riendas orgánicas de Génova y se defendió de quienes le acusan de escorar el partido a la derecha y cuestionan el tono que ha empleado en los últimos días diciendo que él no llamó “indecente” a Mariano Rajoy, como hizo Pedro Sánchez, “ni asesino” a José María Aznar o “corruptos a todos los socialistas”.