Sánchez compareció en la sala de prensa del Palacio de la Moncloa pasadas las diez de la mañana para informar de esta decisión tras la derrota que el miércoles sufrió en el Congreso de los Diputados su proyecto de Presupuestos Generales del Estado.

Tras consultar el adelanto electoral con su gabinete en una reunión extraordinaria del Consejo de Ministros, como requiere la Constitución, e informar al rey Felipe VI, Sánchez explicó que prefiere dar la palabra a los españoles "para avanzar" y que ellos decidan "el futuro" del país.

Sánchez despreció la opción de "continuar gobernando con unos presupuestos que no son los nuestros", dado que al salir derrotados los suyos en el Congreso estaría obligado a seguir gestionando con la prórroga de los que Rajoy logró sacar adelante para 2018.

En este sentido, lamentó que los independentistas hayan tumbado su proyecto, por ser "unos presupuestos sociales que hubieran revitalizado el sistema nacional de dependencia, la protección por desempleo a parados de larga duración, las políticas de vivienda y de alquiler y la educación con un impulso a las becas", entre otras cosas.

Antes de desvelar la fecha de los comicios, Sánchez presumió de haber estado ocho meses y medio en La Moncloa tras ganar el pasado 1 de junio una moción de censura con la "legitimidad democrática" que otorga la Constitución española. Reivindicó su legitimidad y criticó a la oposición las dudas constantes sobre su Ejecutivo. “Hemos sido coherentes, dijimos que veníamos a gobernar y hemos gobernado”, dijo.

Sacó pecho por haber conformado un Consejo de Ministros con el mayor número de mujeres entre los países de la OCDE y en el que han trabajado "personas capaces que son referentes sociales y referentes internacionales en sus ámbitos de responsabilidad". "A todos ellos les doy las gracias por su compromiso y su trabajo tan intenso", dijo con tono de despedida.

Sánchez destacó que su propósito en estos meses ha sido "unir a los españoles y dar una respuesta colectiva" a los problemas de los ciudadanos y recordó que para ello ha aprobado "13 leyes y 25 reales decretos", además de transponer directivas europeas "que dormían el sueño de los justos" bajo el mandato de Mariano Rajoy y que suponía merca del erario público.

También se congratuló de haber "recuperado la presencia europea e internacional" de España en foros internacionales, que, a su juicio, "hacía falta".

MEDIDAS

Entre las medidas puestas en marcha en este tiempo, citó la recuperación de la sanidad pública universal, la reforma del sistema de elección del presidente de RTVE para que sea una televisión "pública, objetiva y plural", el proceso para la exhumación de Francisco Franco del Valle de los Caídos, la reforma de la Constitución para reducir los aforamientos y que las personas con discapacidad no sean llamadas disminuidas, la "mayor oferta de empleo público de la década", la subida salarial de empleados públicos y el "refuerzo" del Estado autonómico.

El presidente recordó los tres ejes de su mandato: la consolidación del crecimiento económico y la creación de empleo digno, la reconstrucción del Estado del bienestar para redistribuir los frutos del crecimiento y reforzar las instituciones democráticas. Ello le dio pie a comentar todas las medidas sociales y económicas impulsadas.

También se refirió a las que se han “paralizado”, “no por falta de mayoría parlamentaria, que existía, sino por una oposición que ha utilizado las instituciones con fines partidistas, por una oposición que no ha atendido a razones”, al tumbar los Presupuestos.

“Es evidente que teníamos que presentar los Presupuestos y lo hicimos; desgraciadamente no han salido adelante, pero hay derrotas parlamentarias que son victorias sociales y la ciudadanía ha visto nuestra hoja de ruta”, indicó.

Y se mostró “convencido, convencido, de que es posible recuperar la política útil para la ciudadanía, de que es posible recuperar la tolerancia, el respeto, el sentido común, la moderación, y dar la espalda a la crispación en nuestro país”.

FUERA DE LA CONSTITUCIÓN, NADA

El jefe del Ejecutivo afeó a las formaciones independentistas que por “otras razones que nada tienen que ver con los intereses” de los ciudadanos hayan abocado a España a las urnas al rechazar las cuentas públicas y les dijo que tendrán que explicar su posición de rechazar todo “si no se habla de autodeterminación”

Repitió el mantra que mantiene desde que estaba en la oposición sobre la cuestión catalana y remarcó su apuesta por el “diálogo” como “la única vía” hacia la solución. “La voluntad del Gobierno ha sido siempre la misma, la que ha caracterizado al PSOE y a mi persona, cuando he estado como líder de la oposición y hoy como presidente del Gobierno. Nosotros dentro de la Constitución y la legalidad estamos dispuestos a hablar, a dialogar y a encontrar una solución. Dentro de la Constitución todo, fuera de la Constitución nada”, remarcó.

El presidente apostó por “defender el diálogo siempre, siempre, siempre”. “Nunca renunciaré al diálogo, porque creo que en el diálogo podemos encontrar el camino para resolver nuestras desavenencias”, manifestó.

CAMPAÑA

Por último, el presidente apuntó que a partir de ahora van a “salir al campo” a “explicarse” sobre las medidas y das las “razones” de lo ocurrido, pero asegurando que “el Gobierno va a trabajar hasta el último minuto”.

“Ellos y ellas decidirán el futuro de España con su voto en las urnas. Y lo que decidan, siempre, siempre, siempre será un gran acierto”, dijo afianzando la legitimidad de las urnas.

Reconociendo que “ha sido un placer” estar al frente de la Presidencia del Gobierno, Sánchez trasladó a los periodistas que espera seguir viéndoles “durante mucho tiempo”.