Según anunció Duque en una entrevista en Servimedia, el objetivo de su visita a las bases españolas en el continente helado (España cuenta también con la 'Gabriel de Castilla') es dar a conocer el trabajo que se hace allí. El acto central del viaje, que cuenta con representantes de 16 países y durará varios días, tendrá lugar el sábado 2 de febrero, cuando se ‘bautizará’ como 'Ballester-Castellví' a los laboratorios de la base, en honor a dos de los pioneros del CSIC en esa infraestructura.

En la Antártida, la actividad científica española se desarrolla en áreas muy diversas como la geología, la biología, el glaciarismo, estudios de atmósfera, estudios químicos, estudios de impacto humano, ingeniería de comunicaciones, meteorología, el cambio climático, la vulcanología, la geodesia, la hidrografía y la oceanografía.

El ministro subrayó que la Antártida es “un sitio especial” desde la perspectiva geopolítica, con unas “normas estrictas para preservar” el entorno.

“Es un sitio singular dentro del globo terráqueo donde se pueden estudiar fenómenos de evolución de clima, monitorización del agujero del ozono, que surgió en la Antártida y parece que estamos consiguiendo que se cierre, evolución tanto de plantas y animales que viven allí y cómo están cambiando con el proceso de calentamiento de la Tierra y muchas partes de la ciencia del cambio climático que concluyen que en la Antártida se obtienen datos que no se podrían obtener en otro sitio”, explicó.

24 PROYECTOS

En la campaña antártica 2018-2019 (España trabaja de forma ininterrumpida desde hace 32 campañas, aprovechando el verano austral) se están desarrollando 24 proyectos de investigación, de los que 18 están financiados por la Agencia Estatal de Investigación. También se presta apoyo a proyectos de otros países, como Colombia, Reino Unido, Chile, Noruega, Brasil y Portugal.

La BAE 'Juan Carlos I' se abrió en la campaña antártica 1987-1988, de forma paralela a la creación de un programa de investigación. Está gestionada logísticamente por la Unidad de Tecnología Marina del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (UTM-CSIC).

La BAE 'Juan Carlos I', situada en la isla Livingston, tiene capacidad para 51 personas y 220 metros cuadrados para laboratorios.

Años después, en la campaña 1989-1990, se abrió la BAE 'Gabriel de Castilla' (por el Ejército de Tierra en sus aspectos operativos y la UTM-CSIC en la dotación de instrumentación científica y gestión logística). Esta otra base, en la isla Decepción, tiene capacidad para 28 personas y un módulo laboratorio.

La coordinación de las actividades en ambas bases se efectúa bajo la autoridad del Comité Polar Español, siendo la UTM-CSIC la responsable y ejecutora de la coordinación logística.

Además de las bases, la investigación antártica española tuvo otros hitos posteriores, como que en 1991 cuando se botó el Buque de Investigación Oceanográfica 'Hespérides' y en 1998 se creó el Centro Nacional de Datos Polares (CNDP). Hubo que esperar a la campaña de 2015-2016 para ver por primera vez al Buque Oceanográfico 'Sarmiento de Gamboa' en la Antártida.

El 'Hespérides' tiene 37 plazas para personal científico y 56 de tripulación y cuenta con laboratorios “seco” y “húmedo”. Está gestionado por la Armada.

El 'Sarmiento de Gamboa', con 28 plazas para personal científico y 15 de tripulación, también cuenta con laboratorios “seco” y “húmedo” y está gestionado por el CSIC.

‘MUCHO FUTURO’

Los trabajos de remodelación que inaugurará el ministro Pedro Duque, que se han desarrollado durante dos años, han sido costeados por el Ministerio y el CSIC y buscan dotar a la base de “mucho futuro” y que pueda mantenerse “muchos años”. “Ya tocaba remodelarla”, recalcó Duque en Servimedia, donde insistió en dar una mayor visibilidad a la ciencia para que tenga más peso “y más proyección” en la opinión pública.

En ese objetivo del Gobierno de dar “más presencia” a la investigación, destacó, se incluye la reciente aprobación de la estabilización de 1.500 puestos de empleo temporal en los organismos públicos de investigación, lo que supondría el 10% de la plantilla.

Esta medida supondrá la estabilización del 10,5% de las plantillas totales de los seis Organismos Públicos de Investigación dependientes del Ministerio, que cuentan con 13.836 empleados. Entre ellos, el que más plazas tiene asignadas es el CSIC, que consolidaría 960 puestos temporales para investigadores y técnicos.