Así se lo dijo a la ministra de Asuntos Exteriores y Cooperación, Trinidad Jiménez, quien hoy compareció en la Comisión de Exteriores de la Cámara Baja para informar de la actuación del Gobierno de España tras el desmantelamiento forzoso del “Campamento de la Dignidad”.

Tras hacer hincapié en “la simpatía, el afecto y el cariño de los españoles, con independencia de su ideología”, hacia el pueblo saharaui, De Arístegui recalcó que la sociedad demanda “respuestas claras, transparencia y firmeza” para ayudarle.

“Los intereses no están por encima de todo, los derechos humanos están por encima de todo”, dijo el diputado popular, para quien “ante los sucesos trágicos y terribles lo que hay que hacer es exigir transparencia”.

Además, señaló que el “cerrojazo informativo” de Marruecos “no tiene justificación posible” y se preguntó por qué el país alauita expresa “esa saña” con los informadores españoles.

De Arístegui manifestó que sólo el Gobierno socialista no ha cumplido con el “principio de neutralidad activa” que ha regido la diplomacia española desde la UCD hasta el Gobierno de José María Aznar. A su juicio, la “política exterior socialista ha sido un freno a la solución y eso va a quedar escrito con letras negras en la historia”, dijo.