El audio fue grabado con un teléfono móvil el pasado 23 de diciembre por su mujer y dura cerca de cinco minutos. El excomisario expresa su deseo de dar su versión de los hechos que se investigan “por primera vez” e insiste en que no es él quien está filtrando grabaciones. Es más, asegura que el director del CNI, Félix Sanz Roldán, “tiene controlado” a los responsables de las filtraciones.

"Si alguien quiere hacer daño a la monarquía son los que se abrazan con los abogados de Podemos (acusación popular en la causa) cada vez que coinciden con ellos. Conmigo que no cuenten, allá ellos y su conciencia. Esta secta de 'illuminatis' solo busca destruir la corona a cualquier precio", dice el excomisario en referencia a los fiscales Anticorrupción que investigan la presunta trama.

La grabación comienza con la presentación de Villarejo, que afirma hacer el vídeo “en defensa del honor de mi familia y del mío propio” y asegura que se le mantiene en prisión preventiva “para impedir que pueda hablar” y que se defienda de “tanto bulo y tantas mentiras”. Insiste en que el no envió ningún emisario a hablar con “ningún fiscal” y que fue Anticorrupción quien se puso en contacto con su mujer y su abogado y lanza una acusación sobre la marcha del juez Diego de Egea de la Audiencia Nacional: “Le han echado porque quería ponerme en libertad”.

El excomisario dice haber sido objeto de “una trampa” para justificar “una investigación inquisitorial” y demostrar que es “un chantajista peligroso”. Califica lo sucedido hasta ahora de “campaña brutal” en su contra y dice sentirse ya condenado: “Soy culpable y no tengo solución, mejor que me mandaran a Guantánamo”.

Villarejo explica que la Fiscalía le pidió colaboración total pero no sobre terrorismo o narcotráfico, sino que le preguntaron por el Rey, petición a la que “me niego en redondo”. “Conmigo que no cuenten”, dice más adelante ante de calificar al Ministerio Público como “secta de `iluminatis´ que sólo busca destruir a la corona a cualquier precio”.

En otro momento del mensaje, asegura que el director del CNI “sabe y tiene controlado quién está filtrando y sólo le colaron la charla con la princesa Corinna porque se confió con lo de los abrazos pensando que los tenía controlados”.

También hace incursiones en la política y advierte al PP que se “va a dejar montar una segunda 'Gürtel' con el tema 'kitchen'” sin percatarse de que el magistrado y ministro del Interior, Manuel Marlaska, es “un auténtico trilero manipulando causas”. Concluye asegurando que está “preparado para lo peor” y expresando su deseo de que se le oiga en la Audiencia Nacional.