Cambio climático
Científicos españoles estudiarán por primera vez cómo influye el cambio climático en el hielo submarino de la Antártida
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Científicos españoles liderarán la expedición Explosea (Exploración de emisiones submarinas de fluidos hidrotermales, mineralizaciones y geobio-sistemas asociados), que estudiará por primera vez la influencia del cambio climático sobre el hielo submarino en la Antártida.
La expedición tendrá lugar del 16 de febrero al 18 de marzo de 2019 y se desarrollará en la Antártida a una profundidad de entre 30 y 2.500 metros.
Partirá a bordo del buque 'Hespérides' desde Punta Arenas (Chile) y retornará a Ushuaia (Argentina). Su objetivo es explorar y detectar posibles emisiones submarinas de metano y otros gases en los fondos marinos de la Antártida relacionadas con el cambio global o con actividad hidrotermal asociada a volcanismo activo.
El equipo de investigadores que embarcará en el buque oceanográfico 'Hespérides' tiene un perfil multidisciplinar y estará compuesto por geofísicos marinos, hidrógrafos, vulcanólogos, geoquímicos y microbiólogos de las universidades Complutense de Madrid y de Las Palmas; Instituto Hidrográfico de la Marina (IHM); Involcan de Canarias; EMEPC (Portugal); universidades de Göttingen (Alemania), Viena (Austria) y Bergen (Noruega); OKEAN-Geology de San Petersburgo (Rusia), y del Ingemmet (Perú). Estarán coordinados por Luis Somoza, profesor de Investigación del Departamento de Geología Marina del Instituto Geológico y Minero de España (IGME).
HIELO SUBMARINO
Aunque el estudio del retroceso del hielo en los glaciares ligado al cambio global ha generado un gran número de investigaciones en la Antártida, ésta es la primera vez que se analizará cómo sufre el hielo submarino los efectos del cambio climático.
En el Ártico se han detectado numerosas emisiones submarinas de metano que se relacionan con la desestabilización del suelo helado (permafrost), formado durante épocas glaciares antes de quedar sumergidos por el ascenso del nivel del mar.
Como la temperatura del agua del mar en la Antártida (en torno a 1ºC) es muy superior a la registrada en la superficie terrestre (entre 20 y 40ºC bajo cero), el hielo de la superficie se comienza a fundir progresivamente bajo las aguas del océano. Este permafrost submarino puede servir de almacenamiento de metano, que constituye un importante gas invernadero.
Por ello, la campaña Explosea estudiará si este hielo submarino de la Antártida se está derritiendo, ya que este proceso puede liberar grandes cantidades de metano a la atmósfera, emisiones que a su vez pueden generar grandes cráteres submarinos de más de 2,5 kilómetros de diámetro en los fondos marinos.
Al mismo tiempo, en estas profundidades se puede formar el denominado gas hidratado, que es la forma del gas submarino bajo condiciones de presión y temperatura.
Estas emisiones de fluidos ya han sido objeto de estudio, asociadas a la actividad volcánica reciente en la isla de Decepción y en el margen moroeste de la Península Antártica. Se utilizará un minisubmarino ROV Explorer portátil desde una embarcación rígida para la detección y muestreo de burbujeos submarinos procedentes del metano submarino y la actividad hidrotermal.
(SERVIMEDIA)
21 Dic 2018
AGQ/caa