Desde ERC indicaron que el voto a favor debe entenderse como "un nuevo gesto en favor de la construcción de un marco de confianza y diálogo en el que, a pesar de todo, continuamos creyendo".

No obstante, señalaron que son conscientes de que la medida "no va a tener ningún recorrido ante el veto que va a recibir en el Senado, y que de ningún modo presupone ninguna actuación futura respecto a nuestra posición ante los Presupuestos Generales del Estado". Se une así ERC al PDECat y Compromís que ya han anunciado que votarán a favor, al igual que hará previsiblemente Unidos Podemos.

La diferencia son unos 6.000 millones más de posibilidad de gasto, de los cuales 2.400 serían para las comunidades, otros 2.400 para la Seguridad Social y los 1.200 restantes para el presupuesto estatal propiamente dicho.

Aunque el Congreso apruebe mañana la senda de déficit, el Senado aún podría tumbarla el día 27, puesto que el Congreso todavía no ha modificado la Ley de Estabilidad Presupuestaria y en concreto el artículo que faculta a la Cámara Alta para exigir al Gobierno que presente una nueva senda de déficit en lugar de dejar la última palabra a la Baja, como ocurre con el resto de las iniciativas legislativas.