Sesión de control

Sánchez se abre a transferir prisiones a Euskadi pero no la Seguridad Social

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se abrió este miércoles a negociar con el lehendakari, Iñigo Urkullu, las transferencias a Euskadi de competencias sobre prisiones, pero no la gestión de la Seguridad Social.

Lo dijo en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados al responder a la portavoz de EH Bildu, Marian Beitialarrangoitia, sobre las transferencias pendientes. El presidente aseguró que la Constitución y el Estatuto ha sido “un éxito” para Euskadi y para España porque han permitido el desarrollo, la modernización y la convivencia. El fin de ETA, añadió, que es “patrimonio de todos”, es muestra de ese éxito del modelo de convivencia.

Sánchez subrayó que el Gobierno está “comprometido” con la ejecución del Estatuto, y pidió que en la reforma que se tramita en el Parlamento Vasco no se pierda la “pieza esencial” de su aprobación, que fue el pacto transversal entre la comunidad nacionalista y la no nacionalista dentro de Euskadi.

Beitialarrangoitia denunció que Sánchez habla “con la Constitución en la mano” pero sus palabras no se corresponden con sus hechos, porque en 1978 se aprobó un modelo autonómico que sus impulsores “no tenían intención de cumplir” sino solo de aceptar para “pasar página sin ruptura”.

Denunció que hay decenas de competencias no transferidas, y que solo se avanza en ese sentido cuando los gobiernos del Estado atraviesan serias “debilidades” para sacar adelante Presupuestos o investiduras. Ahora, aseguró, la supuesta voluntad de diálogo es proporcional a la intención de “no cambiar nada”.

Denunció la “supeditación al Estado”, una supuesta bilateralidad que no es tal, y concluyó que el modelo de 1978 ya “no es válido” porque n o es “de igual a igual”. Reconoció que su formación seguirá pidiendo la soberanía plena en todo caso, pero dejó claro que no va a renunciar a “nada de lo que tengamos”, por lo que exigió la ejecución del Estatuto.

Sánchez remarcó su defensa del Estatuto y del Estado autonómico “sin ningún tipo de ambajes”, y subrayó las “contradicciones” del PP al defender su actual líder, Pablo Casado, la recentralización de competencias que su antecesor José María Aznar transfirió, algo que tiene “cierta gracia histórica”.

Aseguró que es consciente de las transferencias pendientes y apeló al acuerdo con Urkullu para impulsar, de acuerdon con el calendario aprobado en la comisión bilateral, la transferencia de “buena parte” de esas competencias. “Es verdad que queda pendiente la Seguridad Social”, reconoció, y en prisiones el Gobierno está “dispuesto a hablar”.

(SERVIMEDIA)
19 Dic 2018
CLC/caa