Ampliación

Grabaciones Cospedal-Villarejo

Cospedal deja el escaño para “liberar” al PP de “cualquier ataque”

MADRID
SERVIMEDIA

La ex secretaria general del Partido Popular María Dolores de Cospedal anunció este miércoles que deja su escaño en el Congreso de los Diputados para “liberar” a su formación de “cualquier ataque” tras salir a la palestra extractos de sus conversaciones con el excomisario José Manuel Villarejo.

Confirmó su renuncia a ser diputada a través de un comunicado emitido por la tarde, después de que el lunes pactase con la cúpula del PP su marcha de la Ejecutiva Nacional del partido en un momento en el que seguían saliendo a la luz conversaciones con las gestiones que pudo haber hecho con Villarejo, entre las que se podrían incluir el espionaje a compañeros como Javier Arenas u obtener información de un hermano del entonces ministro Alfredo Pérez Rubalcaba.

En su misiva, la ex secretaria general de los populares explica que toma esta decisión “para liberar al PP de cualquier ataque, por injustificado que este sea, sobre todo cuando estamos en un importante proceso electoral en Andalucía”. En todo caso, recalca que no ha hecho “nada” de lo que se sienta avergonzada.

La que fuera ‘número dos’ de Mariano Rajoy en Génova añade que también ha tomado este camino para que su formación política se sienta “libre de denunciar la situación que vive nuestro país, empezando por un presidente que lo es gracias a los enemigos de España y terminando por ese mismo Gobierno con dos ministros cesados y otros cuatro seriamente cuestionados, respecto a los cuales la vara de medir parece ser muy distinta”.

"NUNCA HE MENTIDO"

“A diferencia de ellos, por poner un solo ejemplo, yo nunca he mentido”, declara Cospedal, al tiempo que admite que “nunca” pensó que fuera a dejar la política “en un ambiente así”. Aunque hasta hace unos días estaba convencida de que no tenía por qué dejar su escaño, explica que tras reflexionarlo más ha querido adelantar su decisión de dejar la política porque tiene “derecho” a cuidar de sí misma y de los suyos.

Recalca el “honor” que le ha supuesto haber sido la secretaria general del PP durante los últimos diez años. “Ni un solo día consideré la actividad política como un trabajo más”, manifiesta Cospedal, antes de argüir que “estar por estar, a cualquier precio, no tiene sentido”.

“Siempre he creído necesario sentirme parte de un proyecto más importante que yo misma, sea cual sea la responsabilidad que ocupara en él”, prosigue, para acto seguido entrar en materia de corrupción y decir que su “actitud” ante estos casos le hizo “merecedora de la autoridad para defender el honor de tantos compañeros que fueron objeto de injusticias, sospechas y vapuleos”.

No obstante, reconoce que ha cometido “muchos errores” en su vida, pero defiende que su “interlocución hace nueve años con el responsable de una empresa autorizada por el Ministerio del Interior no es uno de ellos”.

SU "PAPEL" DE SECRETARIA GENERAL

“Reitero mi absoluta tranquilidad de conciencia ante lo que hice: escuchar y pedir aclaraciones, en mi papel de secretaria general, a quien acudió mí para ofrecerme información que podía ser de interés capital para esclarecer comportamientos sospechosos que después la Justicia calificaría como delictivos”, expone.

Relata que fue elegida secretaria general en junio de 2008 y que pocos meses después se empezó a conocer la existencia de caso de corrupción de personas “vinculadas” al partido y que se aprovechaban de las siglas para perpetrar delitos que desde hace tiempo están judicializados.

En este contexto, defiende que era su “obligación tratar de saber qué estaba ocurriendo” y su “deber” apoyar al partido “desde la regeneración”, aunque ello le supusiera granjearse enemigos. “No habría actuado de forma diferente diez años más tarde”, se reafirma.

Así, sostiene que procuró por todos los medios a su alcance, y “dentro de los límites de la ley”, conocer la problemática que afectaba al PP. “¿Se esperaba que yo hubiera mirado a otro lado si podía conocer mejor lo que estaba sucediendo?”, se pregunta.

EQUIVOCACIONES

“Si es un pecado mortal haber hablado con un comisario de policía que por aquel entonces acababa de ser condecorado por el entonces ministro del Interior del PSOE, entonces me equivoqué”, continúa, al tiempo que reconoce que en lo que “seguro” que se equivocó fue en pedir a su marido, Ignacio López del Hierro, que le ayudara en una interlocución que “no era fácil”.

Asume, por tanto, que se equivocó a la hora de pedir a su marido que ayudara al PP y agrega que ahora “él está pagando” por haberle ayudado a “tratar de tener una visión más clara de lo que estaba ocurriendo”. Pese a todo, reivindica su “lucha” contra los que traicionaron al PP en lo que le supuso un trabajo “ingrato y difícil”.

Asegura que “nunca” ha tenido que mentir y, es más, que “siempre” ha dicho la verdad y esta es, según sus palabras, que “nunca” ordenó ni encargó espiar a nadie. “Pedí más información para confirmar si eran ciertas cuestiones concretas que me habían hecho llegar y que podían afectar a determinadas personas. Esa era mi responsabilidad”, insiste en su texto.

Además, la exministra de Defensa aprovecha para pedir a sus compañeros de partido que “cierren filas ante las injusticias”, porque “cuando tus adversarios políticos detectan que tu fortaleza es vulnerable los ataques se multiplican”.

(SERVIMEDIA)
07 Nov 2018
MFN/gja