“A mí me encantaría que lo fuera, pero tiene que querer”, indicó durante la presentación de resultados del grupo, donde recordó que ha sido el mismo González el que ha dicho que no mantendrá ningún cargo “ni en la entidad ni en la fundación”. “Ha dicho: 'si me voy me voy'”, recordó Torres.

El banquero calificó de “bastante ejemplar” tal renuncia en la medida que implica que “no quiere seguir influyendo en la marcha” del grupo, y justificó que el traspaso de poderes lo anticipe para que la nueva cúpula empiece la gestión con un ejercicio completo.

González dejará sus responsabilidades el 31 de diciembre pese a que podía haber continuado hasta que cumpla los 75 años fijados en Estatutos como edad obligatoria para la jubilación, en octubre de 2019.

Su salida anticipada implica que no presidirá la Junta de Accionistas en la que se rendirán cuentas a los dueños del grupo sobre el ejercicio actual. Torres restó importancia a esta situación y lo justificó en esa transición programada. “Él tenía claro que era el momento adecuado por el momentum del banco” y para el equipo gestor, explicó Torres.

El hoy consejero delegado y presidente en el momento del relevo reconoció que durante los 24 años de etapa del grupo bajo la dirección de González “ha habido aciertos y ha habido errores”, al ser cuestionado si al anticipar la salida se ahorra las quejas de accionistas descontentos por la trayectoria bursátil del banco.

Torres reconoció que pueden darse esas quejas, si bien defendió que deja en BBVA “el mejor proyecto” de la banca global, tras impulsar su internacionalización y la digitalización.

CANDIDATOS A CONSEJERO DELEGADO

Menos claro fue con la incógnita sobre quién le sucederá a él en el cargo de ‘número dos’. Se limitó a reiterar que el proceso de transición se encuentra “bien planificado y bien ordenado” y “con toda seguridad será alguien de la casa”. “Hay mucho talento en el banco”, refirió.

En estos momentos la designación para consejero delegado está pendiente de un informe de la Comisión de Nombramientos del banco y sujeto al análisis de idoneidad del Banco Central Europeo (BCE), concedió, con la única meta de que cristalice a final de año, cuando él promoverá a la Presidencia.

Según Torres, esta incertidumbre “para nada está teniendo impacto alguno en las dinámicas internas” ni distrae a los equipos “en absoluto”. No quiso dar pistas sobre el perfil que debería reunir el ejecutivo, pero sí que en la gestión apostará por “aprovechar las tecnologías”, y anunció un plan para mejorar la plataforma en favor de que los procesos sean “mejores”, más rápidos, automatizados y con menores errores porque el grupo ha crecido con una multiplicación de inversiones en distintos países donde adoptó sistemas individuales.

Entre los candidatos a asumir su responsabilidad se han barajado el director financiero del grupo, Jaime Sáenz de Tejada; Ricardo Forcano, director global de Talento y Cultura del grupo; Javier Rodríguez Soler, responsable de Estrategia y M&A, o Juan Asúa, de Corporate & Investment Banking.