España se convertirá de esta forma en el tercer país del espacio Schengen en exigir este visado después de Francia y República Checa, según la ONG. “Precisamente, los únicos dos países de la Unión que le superan en el número estados a los que imponen dicho visado”, denunció CEAR.

Según sus previsiones, esta medida afectará a más de medio millón de personas palestinas registradas en Líbano, de las cuales más de la mitad ya han abandonado el país debido a las condiciones precarias en las que están obligadas a vivir y a las frecuentes violaciones de sus derechos.

Líbano no ha firmado la Convención de Ginebra de 1951 ni el Protocolo sobre el Estatuto de los Refugiados de 1967, de manera que no garantiza la protección conforme al derecho internacional, según la ONG.

Palestina fue el quinto país de origen de las personas que solicitaron asilo el año pasado en España, con un total de 1.165 solicitudes, a las que hay que sumar más de 1.500 en los nueve primeros meses de 2018.

“Históricamente se trata de una de las principales nacionalidades de las personas que buscan refugio y una de las que mayor concesión de estatutos de refugiado y protección subsidiaria recibe en nuestro país”, informó CEAR, por lo que lamenta que el Gobierno español se sume a “una política que dificulta las vías de llegada legales y seguras para un colectivo que es merecedor de protección internacional”.