Cataluña

Rivera se erige en "aglutinante y casa común del constitucionalismo del siglo XXI"

- Acusa a Sánchez de "vender" a la mayoría de catalanes y "sacrificarlos" a los independentistas

Reus (Tarragona) Madrid
SERVIMEDIA

El presidente de Ciudadnaos, Albert Rivera, erigió este sábado a su formación como "aglutinante, casa común del constitucionalismo del siglo XXI" para hacer frente al independentismo y al populismo, y reclamó al PP y al PSOE "un poquito de sentido de Estado, que nos estamos jugando el futuro de España".

Rivera participó en un acto político celebrado en Reus (Tarragona) para conmemorar un año de la declaración unilateral de independencia en Cataluña bajo el lema 'Nunca más, mai mes', y en el que también participaron la presidenta del grupo parlamentario de Ciudadanos en el Parlamento autonómico y portavoz nacional, Inés Arrimadas; y el portavoz, Carlos Carrizosa.

Rivera recordó aquel día, "uno de los más tristes de la democracia española", y aseguró que ante los políticos "irresponsables" y que no cumplen las leyes reclama Justicia. "Ni venganzas ni indultos. Justicia", al tiempo que se dirigió a quienes huyeron de España para preguntarles por qué huyeron si tan convencidos están de su inocencia y de que lo que hicieron no es delito.

En el actual escenario, reclamó dejar trabajar a los jueces y a los fiscales y "que no se metan políticos ni politicuchos por medio", porque si España sigue siendo un país unido es porque ellos hicieron lo que no hicieron los políticos en cuarenta años, por la manifestación de constitucionalistas del 8 de octubre tras el golpe de los independentistas y porque el jefe del Estado salió "a dar la cara que no dabe el presidente del Gobierno", en ese momento Mariano Rajoy.

Ahora queda ver si se aprende de los errores, alertó, o se opta por "repetirlos", y criticó sin mencionarle a quien "por pasar un cuarto de hora más" como presidente del Gobierno es capaz de "vender" a la mayoría de los catalanes, a los jueces y a los fiscales, y "ponerlos en el sacrificio" exigido por quienes intentaron romper España.

Rivera pidió estar "del lado correcto", como durante el golpe de Estado de 1981 o en la batalla contra ETA, y dijo a Pedro Sánchez que "no tiene escrúpulos" porque "se pasea y pacta" con el presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, "como si fuera Churchill" después de referirse a él hace meses como "el Le Pen" de la política española, y "se atreve" a "interferir" desde la tribuna del Congreso de los Diputados en la labor de jueces y fiscales, ejerciendo incluso de "abogado defensor" de los independentistas presos.

"PACTO DE LA CÁRCEL"

Rivera denunció "el pacto de la cárcel" y emplazó a los independentistas a "aprovechar" el tiempo antes de que Sánchez convoque elecciones, porque después los españoles dirán no "a los indultos, al pasteleo, a traficar con intereses políticos a cambio de escaños".

En esos comicios, dijo, Ciudadanos tiene que ser "aglutinante, casa común de los constituconalistas del siglo XXI", extrapolando al resto de España el éxito en Cataluña, atrayendo a los "muchos" socialistas que no comparten lo que está haciendo Sánchez y a quienes en el PP quieren "un proyecto nuevo". En ese contexto, reprocó a Sánchez y a Pablo Casado sus "peleas" que considera escenificadas, y les exigió a ambos "un poquito de sentido de Estado, que nos estamos jugando el futuro de España".

Se mostró convencido de que en las próximas elecciones en Andalucía se verá "quién sube y quién baja", y de que muchos andaluces impulsarán ese cambio regional que será el preludio de un cambio también en el conjunto de España.

Arrimadas recordó los días "de preocupación, de incertidumbre, de inmensa tristeza" por el golpe de los separatistas, a los que advirtió de que han podido romper relaciones personales, de amistad y familiares, pero "jamás separarán a Cataluña del resto de España". "Hicieron lo que hicieron sabiendo el daño que provocaban", aseguró, y eso a pesar de que "no pudieron tener más advertencias, más oportunidades y más asesoramiento" para intentar evitar "el desastre". Declararon la independencia "sin importarles los catalanes, sin importarles Cataluña", denunció.

Sin embargo, añadió, hay cosas que han cambiado, y ahora dentro y fuera de Cataluña saben que la mayoría de catalanes no son independentistas y que el problema no es entre Cataluña y el resto de España sino "entre catalanes".

Pese a ello, con el Gobierno de Sánchez "muchos catalanes nos sentimos de nuevo abandonados" porque ante los ataques de los independentistas la respuesta es "no pasa nada, que me quitan el helicóptero". Ciudadanos, aseguró, "ni callamos, ni olvidamos, ni blanqueamos" lo que ocurrió hace un año, con la convicción de volver a ganar, y hacerlo "con la fuerza necesaria" para poder gobernar en Cataluña.

De hecho, Arrimadas reprochó en un momento dado al PP y al PSOE que si hubieran cambiado la ley electoral hace quince años "no sabríamos quién es Puigdemont ni Torra".

(SERVIMEDIA)
27 Oct 2018
CLC/pai