El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata decretó prisión provisional y sin fianza para el hombre, de origen palestino y detenido en noviembre de 2016 por la Guardia Civil en el aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid-Barajas tras haber intentado viajar a Siria vía Jordania para unirse al Daesh.

Zakarna residía en Vecindario (Gran Canaria), donde se realizaron varios registros. La Guardia Civil mantenía abierta desde 2014 una investigación sobre su relación con actividades a favor del Estado Islámico y comprobó que el detenido había experimentado un proceso de radicalización a través del consumo reiterado de propaganda de este grupo terrorista.

Según el escrito de la Fiscalía, Zakarna hizo numerosas búsquedas a través de Internet utilizando los comandos “operaciones del Estado Islámico”, “las mejores operaciones del Estado Islámico” y “las últimas operaciones del Estado Islámico”.

Como resultado de esas búsquedas tuvo acceso a centenares de archivos propagandísticos de la organización terrorista centrados en documentar acciones de combate de militantes del Daesh y ejecuciones o a alentar la adhesión de nuevos miembros de la organización.

Este rápido proceso de radicalización desembocó finalmente en la decisión de viajar a Siria para tratar de enrolarse en las filas del Estado Islámico. Así, el 10 de julio de 2016 Zakarna realizó un primer viaje vía Turquía, donde fue detenido por las autoridades turcas en las proximidades de la frontera con Siria y devuelto a España. La detención se produjo en Kilis, ya a escasa distancia de la frontera siria. Esta localidad es utilizada por los 'foreing terrorism fhighter' europeos para cruzar la frontera.

El hombre fue detenido por la Policía turca y expulsado del país por atentar contra el orden público. Regresó a España desde el aeropuerto de Gaziantep con escala en el aeropuerto de Ataturk. El investigado portaba al llegar a España 2.000 euros en billetes de 50 euros y llevaba también divisa turca en pequeña cantidad.

Tras ese primer intento, y con la especial vigilancia a la que fue sometido por parte de los agentes del Servicio de Información de la Guardia Civil, se comprobó que el 23 de noviembre volvió a salir de territorio nacional para, esta vez, dirigirse a Jordania, país fronterizo con Siria. La Guardia Civil montó un dispositivo específico, en coordinación con las autoridades jordanas, y se pudo interceptar al detenido, así como obtener nuevos elementos probatorios sobre la verdadera naturaleza de su viaje. Después fue entregado a la Guardia Civil, que le arrestó en el aeropuerto madrileño para su puesta a disposición judicial.