Ordóñez estaba acompañada por Paz Prieto, hija del que fue jefe de la Policía Foral de Navarra, José Luis Prieto, asesinado por la banda terrorista en 1981; y Concepción Fernández, viuda del guardia civil Aurelio Prieto, asesinado por ETA en 1980. Juntas han acudido este sábado al `Iheslari Eguna´ o `Día de los exiliados y deportados políticos vascos’ en Tolosa.

El colectivo vinculado a la izquierda abertzaole `Kalera´ había organizado este homenaje con el objetivo de exigir el retorno de todos los etarras que están prófugos de la justicia sin consecuencias judiciales o penales. El acto ha coincidido con el 35º aniversario del secuestro y asesinato de Lasa y Zabala por parte de los GAL.

Las tres víctimas de Covite se han presentado en la plaza de la Alhóndiga con carteles en los que se podía leer: “Volved a España, las familias de vuestros asesinados esperamos justicia”; “Sois huidos de la justicia porque sois criminales”; “Nosotros también queremos que regreséis. Saldad vuestras deudas de sangre”; y “Volved, tenéis alojamiento y manutención gratis” (con una ilustración de una cárcel).

Además llevaban un listado con los 75 nombres de los etarras huidos de la justicia, entre ellos Josu Ternera, Natividad Jáuregui, o Barrutiabengoa y Ripolles, los asesinos del marido de Concepción Fernández, que están en Venezuela. Ordóñez quiso hacer entrega de esta lista a algunos de los asistentes al acto, pero recibió un sonoro abucheo, gritos de “fascista fuera” y algún que otro empujón que se lo ha impedido. Covite denuncia que en el acto había miembros de la banda terrorista, como Jesús María Zabarte, conocido como `El Carnicero de Mondragón´.