Así consta en la propuesta de resolución número 2 registrada por este grupo en el marco del Debate de Política General, equivalente a nivel autonómico al Debate sobre el Estado de la Nación, con el título "Sobre un pacto de claridad", en alusión a la Ley de Claridad canadiense que canalizó el referéndum de Quebec.

La propuesta, en caso de ser aprobada, llevaría al Parlamento catalán a sentenciar que "la celebración de un referéndum sobre el futuro político de Cataluña es la mejor solución para resolver el conflicto democrático existente en nuestro país".

Desde esa premisa, emplaza a una "amplia mayoría de las fuerzas políticas" a llegar a un acuerdo sobre este referéndum en el que "como mínimo, se determinen el procedimiento, la pregunta, las condiciones para llevarlo a término y la interpretación del resultado".

Otra de las propuestas, la número 1, versa "sobre un modelo de relación de bilateralidad" y llevaría al Parlamento catalán a declarar que "el actual modelo autonómico está agotado" y apuesta por "un nuevo estatus político que permita a las instituciones catalanas gozar de mayores costes de autogobierno, manteniendo una relación bilateral entre el Gobierno de Cataluña y el Gobierno del Estado, basada en los principios de igualdad y diálogo institucional".