Según informó la organización, en una primera fase otorrinolaringólogos especialistas en cirugía de cabeza y cuello visitarán dichos centros educativos para, a través de charlas-coloquio, transmitir a los adolescentes las consecuencias del tabaco, tanto en la salud como en la calidad de vida y en la libertad.

Para ello, contarán también con la participación de pacientes laringectomizados a los que, por causa del tabaco, hubo que extirpar la laringe por la presencia de un tumor maligno.

La coordinadora de la campaña, Ana Sánchez-Prieto, subrayó que el consumo de tabaco es el factor de riesgo “más importante en el cáncer de cabeza y cuello, en general, y más en particular del cáncer de laringe y faringe, donde la mayor parte de casos tienen que ver con que el paciente ha estado fumando desde la adolescencia”.

España tiene una tasa de incidencia de cáncer de laringe especialmente alta, de hasta 5,6 por cada 100.000 habitantes, debido al exceso en el consumo de tabaco registrado durante años, según la SEORL-CCC.

A ello se une que, según diferentes informes, la tasa de carcinomas orales ha aumentado en los países con bajo nivel de ingresos o nivel medio-bajo debido a la adicción a los cigarrillos, según señaló el doctor Pablo Parente, presidente de la Comisión de Cabeza y Cuello y Base de Cráneo de la SEORL-CCC.

SEGUNDA DROGA MÁS EXTENDIDA

Según diferentes estadísticas recogidas por la SEORL-CCC, el tabaco es la segunda droga más extendida entre los estudiantes de 14 a 18 años tras el alcohol, como demostraría el hecho de que el 38,4% de los alumnos han fumado alguna vez en su vida.

Por otra parte, el inicio en su consumo se produce a una edad media de 13,9 años, mientras que a los 19 el 60% de los jóvenes ya lo han probado.

Asimismo, en cuanto a la adquisición del hábito de fumar a diario la edad media se sitúa a los 14,6 años, menos de un año después de haber probado el primer cigarro.

Tras aseverar que el tabaco es el responsable de uno de cada cuatro tumores malignos y el factor más influyente en, al menos, 18 tipos, entre los que se encuentran el de orofaringe y laringe, el secretario de la SEORL-CCC, Mario Fernández, defendió que la adicción “comienza una vez se han pasado las cinco cajetillas y la prevalencia de su consumo aumenta con la edad”.

“Cada vez nos estamos encontrando pacientes con cáncer de laringe más jóvenes, por lo que si esto sigue así, en los próximos 20 años podemos ver un repunte de las tasas de incidencia en España”, advirtió.