Según Valerio, "no cabe hablar de una política de puertas abiertas ni de papeles para todos, pero sí de una inmigración ordenada y regularizada, que nos enriquecerá a todos, tanto a España como a los países de origen de estas personas".

"La línea en la que estamos trabajando es la de facilitar la llegada de contingentes de trabajadores con todos los derechos y también con todos los deberes", afirmó.

En este sentido, Valerio condenó las entradas violentas a Ceuta y Melilla y expresó "todo el apoyo y la solidaridad" del Gobierno a los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que fueron agredidos.

"Aunque sabemos que vienen de situaciones muy difíciles y lo entendemos, no se puede entrar en una frontera por la fuerza ni agredecir a los agentes" que la protegen, manifestó. Por este motivo, justificó las expulsiones a Marruecos producidas hace unas semanas.