“Es una técnica parlamentaria que se ha utilizado en reiteradas ocasiones. Lo importante es que vamos a poder tener unos Presupuestos con 6.000 millones de euros más, que va a ser suficiente para poder reconstruir nuestro Estado de bienestar y también continuar garantizando esa cohesión social que necesita nuestro país”, dijo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en los pasillos del Congreso tras las críticas por el mecanismo parlamentario empleado.

El PSOE, justo antes de que acabara el plazo de presentación de enmiendas, presentó una enmienda a la ley de formación de jueces contra la violencia de género que ya se está tramitando para modificar la Ley de Estabilidad Presupuestaria y suprimir la capacidad de veto del Senado sobre los objetivos de déficit de las cuentas públicas.

A través de esta fórmula, el PSOE podría aprobar antes la modificación de la ley, ya que mediante la proposición admitida a trámite este martes en el Congreso tardaría tardar entre dos y tres meses porque PP y Ciudadanos -que tienen mayoría en la Mesa de la Cámara Baja- se oponen a acelerar la aprobación mediante las vías de urgencia y de lectura única, como pretendían el Gobierno y su socio Unidos Podemos.

Sánchez necesita impedir el veto del Senado a los objetivos de déficit para ampliar el gasto público de 2019 en unos 6.000 millones de euros, para lo que ya cuenta con el visto bueno de la Comisión Europea, y aprobar posteriormente unos Presupuestos Generales del Estado que incluyan medidas sociales que está negociando con su socio Unidos Podemos y que necesitan mayor inversión pública.

Fuentes gubernamentales trasladaron a Servimedia que este mecanismo se ha utilizado hasta en seis ocasiones, usando iniciativas legislativas en trámite e incorporando “enmiendas incongruentes” destinadas a modificar otras leyes. Según los datos facilitados por el Ejecutivo, el Partido Popular empleó esta fórmula para modificar hasta 14 leyes.