Juan Isaac Silva, nacido en Cádiz en 1979, perdió el oído a los tres años y lo recuperó a los 30 gracias a un implante coclear. Este hecho marcó su vocación artística, pues se matriculó en la facultad de Bellas Artes huyendo del tedio que le suponían las clases de instituto. Se inició en el arte por la necesidad de explorar y de “encontrar y construir su existencia como persona sorda”.

Para Silva, recuperar el sentido del oído fue un giro en su carrera artística, desde ese momento su obra se centró en la implicación del sonido y la escucha “desde la esencia, el lenguaje, la emoción y la contradicción”.

Las piezas que expone en la VII Bienal son ‘Gestos cotidianos #1’ y ‘Martillo yunque y estribo’, que juegan con el sonido de forma explícita o implícita. Su obra se sitúa junto a la de artistas como Goya, Antonio Saura, McPeak y José Manuel Egea, a los que ha dedicado muchas alabanzas.

Tras la Bienal, Silva adelanta que su próximo trabajo gira entorno a la oralidad en cuanto a su sentido visual desde la experiencia de una persona con sordera, aunque prefiere no concretar nada.

La VII Bienal de Arte Contemporáneo de Fundación ONCE, que este año tiene como temática principal ‘Grandes genios del arte con discapacidad’, ha recibido más de 85.000 visitas. Uno de sus objetivos principales ha sido el de crear una muestra de gran nivel artístico, de ahí la temática de grandes nombres.

Esta apuesta por la calidad se pretende conseguir con la asistencia de un público más especializado (galeristas, coleccionistas, representantes de museos y empresarios del sector) y teniendo como sede a CentroCentro, para las artes plásticas, La Casa Encendida para la danza, el Teatro Valle-Inclán para el teatro, danza y música, y la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas para el ciclo de cine.