Según informó la Delegación del Gobierno en el País Vasco, la operación ‘Tecom-Pikas’ se ha saldado con la detención de seis personas, tres de ellas vizcaínas, dos gaditanas y un magrebí, habiéndose practicado varias entradas y registros en las provincias de Vizcaya (Valle de Trápaga y Portugalete), Málaga (Málaga y Manilva) y Cádiz (La Línea de la Concepción), donde fueron intervenidas diferentes sustancias estupefacientes como hachís, un cultivo ‘indoor’ de marihuana y diverso material informático y telefónico utilizado por la organización criminal.

También se han interceptado dos camiones, uno con 520 kilos de hachís y otro, con dobles fondos, que habría sido utilizado para introducir la droga en España. El precio que alcanzaría la droga en la península sería de más de 800.000 euros, aunque el valor que se obtendría en Francia habría superado los 1.140.000 de euros.

El hachís llegaba a España procedente de África a través de embarcaciones conocidas como ‘planeadoras’ o ‘gomas’, que son aquellas que habitualmente utilizan los narcotraficantes para atravesar el Estrecho de Gibraltar.

Tras la mejora de los métodos de la Policía en la zona del Estrecho de Gibraltar, los agentes constataron cómo los narcotraficantes han modificado la forma en la que adentran la droga en suelo europeo: ocultándola en dobles fondos en camiones.

La red desarticulada ocultaba la droga en ‘guarderías’, almacenes ubicados en el Campo de Gibraltar donde se guarda el hachís una vez introducido en España antes de ser transportado a su destino final. Desde estos almacenes la droga se transportaba a camiones a Francia

Durante el pasado mes de marzo, la Guardia Civil interceptó en el peaje de Areta otro camión de similares características que transportaba 658 kilos de hachís.