En presencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y de todos los miembros del Consejo de Estado reunidos en sesión plenaria, De la Vega realizó un discurso de casi media hora en el que destacó el papel de este organismo de consulta e hizo una defensa de la igualdad, en especial entre hombres y mujeres.

En este sentido, dijo que la presencia igualitaria de mujeres y hombres en el poder “no solo es una cuestión de justicia, que los es, sino también de calidad democrática”. Se trata de la primera mujer que ocupa la Presidencia del Consejo de Estado.

Así, apostó por una modernización de este organismo porque ante el profundo cambio de la sociedad “nuestra institución debe permanecer muy atenta para modernizarse para que la autoridad del Estado moderno descanse no solo en su eficiencia económica y administrativa, sino en que la ciudadanía crea en su legitimidad”. El Consejo de Estado, dijo, tiene la “función capital” de ilustrar lo “que es jurídicamente posible o prudencialmente aceptado” para la toma de decisiones.

La exvicepresidenta destacó que su vida política ha estado marcada por un “compromiso por la igualdad en sentido amplio y en particular por el derecho de las mujeres a participar en plena igualad en todos los ámbitos de la vida política, económica y social”.

Por otra parte, De la Vega destacó que en la actualidad existe una “creciente manifestación de distintos tipos de populismo”, que no son más que “la expresión política de pasiones negativas como el miedo, la envidia o el rechazo; efectos corrosivos sobre la convivencia pacífica”.

De la Vega accedió a la Presidencia apadrinada por Amelia Valcárcel, de la que destacó que es feminista constate y comprometida y que le ha “inspirado” a lo largo de toda su labor; labor a la que llegó, dijo, de la mano de su también padrino, Fernando Ledesma, en 1982 y desde entonces tiene estre sus “posesiones más preciadas lo mucho” que ha aprendido a" su lado”.

Más de medio Gobierno arropó a De la Vega en su toma de posesión, en la que dijo que pondrá “todo” su “afán en no defraudar la confianza” depositada por el jefe del Ejecutivo al designarla.

RESPALDO DEL GOBIERNO

Además del presidente y de la vicepresidenta, Carmen Calvo, al acto acudieron los titulares de Interior, Justicia, Economía, Industria, Empleo, Ciencia, Política Territorial, Transición Ecológica, Sanidad y Educación.

Sánchez tomó la palabra y, en un breve discurso, puso en valor que con De la Vega “hoy se escribe una página especialmente relevante en la historia del Consejo de Estado, ya que por primera vez tiene nombre y rúbrica de mujer”.

Así, ensalzó que “quien hoy asume la responsabilidad de presidir el Consejo de Estado sabe muy bien lo que significa abrir caminos en la larga lucha por la igualdad, tarea a la que ha consagrado buena parte de su vida”; ya que hace 14 años fue la primera mujer en estar al frente de un Consejo de Ministros, por su cargo de 'número dos' del Ejecutivo que presidía José Luis Rodríguez Zapatero, quien estaba entonces fuera de España.

De su compromiso político, Sánchez señaló que ha cumplido con el “servicio público en los tres poderes del Estado, en donde ha tenido ocasión de probar su valía, honestidad y capacidad para alcanzar consensos”.

Por último, destacó la reflexión “serena y reposada” de De la Vega y de la institución que preside desde hoy, cuyo consejo “el Gobierno va a buscar y tener muy presente” para su labor de gestión.

A término del acto, en una conversación informal con los periodistas, la vicepresidenta y ministra de Igualdad, Carmen Calvo, destacó la “profundidad” de las palabras de De la Vega y cómo animó a los varones a reciclarse para entender a la otra parte de la sociedad, lo que llevó a reconocer que “estaría bien” que dirigiera el partido una mujer, desde un “respeto impecable” al proceso interno de los populares.