El PP aspira a que en la primera vuelta de las primarias que tendrán lugar este jueves voten al menos un 70% o un 75% de los 66.706 afiliados que se inscribieron para elegir al sucesor de Rajoy, lo que se traduciría en 46.694 votos emitidos en el primer caso y en 50.029 en el segundo.

Fuentes populares estiman que la participación en la primera votación rondará el 70 o 75% de los 66.706 militantes -de un total de 869.535- que se inscribieron para participar en el proceso congresual al que concurren Elio Cabanes, Pablo Casado, María Dolores de Cospedal, José Manuel García-Margallo, José Ramón García-Hernández y Soraya Sáenz de Santamaría.

Según las mencionadas fuentes, podrían decidir en la primera vuelta poco más de 46.500 personas. En el PP intentan restar importancia a esta baja participación alegando que el proceso es “inédito” y el militante popular poco tiene que ver con el socialista. Sin embargo, desde algunas candidaturas creen que esto beneficia a quienes controlan “el aparato”.

Es más, en el PP reconocen que el sentimiento de incertidumbre y desconcierto ante el nuevo sistema es tal que las sedes están recibiendo llamadas preguntando “a quién hay que votar”. Es la “falta de cultura de primarias” que sí hay en el PSOE, que en su último proceso tuvo una participación de 149.951 militantes de un ceso de 187.815.

Susana Díaz se presentó a las primarias con 59.390 avales, mientras que Pedro Sánchez lo hizo con 53.117, cifras superiores a los afiliados que Génova espera que se pronuncien en la elección del liderazgo a través del sistema que se inaugura ahora y que se aprobó en el 18 Congreso Nacional del PP de febrero de 2017.

1.096 SEDES

Será este jueves cuando los afiliados del PP que previamente se han apuntado puedan expresar por primera vez su opinión sobre el futuro de la formación. Habrá votaciones en 1.096 sedes desde las 9.30 a las 20.30 horas y solo dos de los seis aspirantes pasarán el primer corte y serán proclamados candidatos oficiales a la Presidencia del PP.

Cabanes votará a las 9.30 en el Centro Polivalente de La Font de la Figuera (Valencia), Casado lo hará a las 12.00 en la sede del distrito de Salamanca, donde Sáenz de Santamaría hará lo propio media hora más tarde. Cospedal ejercerá su derecho a las 13.00 en la sede de Albacete, García-Hernández a las 12.30 en Ávila y Margallo a las 13.00 en Jávea (Alicante).

Los tres aspirantes con más opciones, Casado, Cospedal y Sáenz de Santamaría, han culminado las últimas horas de la campaña electoral interna apelando al “voto útil”. El exresponsable de Comunicación del PP asegura que su proyecto es el único que mantendrá la unión, mientras que la exministra de Defensa recuerda que ella sí ha ganado elecciones y la exvicepresidenta se ve con más posibilidades para ganar a Pedro Sánchez. "Todo puede pasar", admiten desde el entorno de los señalados como favoritos.

Con “tres candidatos potentes”, en el PP no ven muchas posibilidades de unión, más tras denunciar la candidatura de Casado “presiones” y “zancadillas” por parte de sus compañeras. Por ello, en Génova ven más factible que la candidatura que quede en segundo lugar tras la votación de mañana se retire y reconozca la victoria de quien logre el primer puesto, pero todo ello "si hay una diferencia notable”.

"VOTO SUELTO" CONTRA EL APARATO

Las fuentes consultadas reconocen que Casado ha hecho la campaña “más intensa”, pero recalcan que no cuenta con los respaldos territoriales de Cospedal o Sáenz de Santamaría, que tienen a su espalda el apoyo público de ministros y barones populares. En todo caso, creen que “el voto suelto o aislado”, que podría llegar incluso al 30% según sus cálculos, lo capitalizará principalmente el exvicesecretario general.

Ahora, en el PP esperan que el que se imponga en la votación de este jueves sea el próximo líder. Argumentan que habrá una “presión muy fuerte” para respaldar al primero en el caso de que la diferencia se haga notar. Pero aquí ya entrarán en juego los compromisarios, que serán los que decidan en la segunda vuelta, que tendrá lugar el 20 y 21 de julio.

Precisamente, hoy también serán elegidos los 3.184 compromisarios en los que los afiliados delegarán la elección definitiva del presidente del PP. Para ello, todas las sedes electorales contarán con dos urnas para votar a candidatos y compromisarios de manera general, salvo algunas que contarán con tres, puesto que tienen que votar a los compromisarios de Nuevas Generaciones en urna independiente de la de los compromisarios nacionales.

“Si hay diferencia entre los candidatos, habrá llamadas buscando que se ceda”, explican desde el PP, conscientes de que mañana, tras la votación de los afiliados, puede haber una “importante labor para que la gente se recoloque”. Pero si la diferencia es “muy ajustada”, en Génova asumen que la batalla se llevará hasta el último día.