Así lo indicó este martes el secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, durante la rueda de prensa para exponer los datos de paro registrado y afiliación a la Seguridad Social correspondientes al mes de junio.

Granado apuntó que estas decisiones fiscales corresponden a otros ministerios aunque desde el de Trabajo, Seguridad Social y Migraciones están colaborando.

El secretario de Estado se limitó a decir que el Gobierno está “reflexionando” sobre qué figuras adoptar y “sería bastante difícil de explicar que teniendo en cuenta lo que ha sido la evolución de las rentas del trabajo, aspiráramos a financiar una magnitud creciente como es el gasto en pensiones y prestaciones, con impuestos vinculados a una magnitud que decrece”.

Granado incidió en que el objetivo de su departamento es “que el volumen de los préstamos sea el menor posible” para pagar las pensiones porque “nadie defiende que la Seguridad Social deba ser financiada con préstamos, es la situación en la que nos encontramos en la actualidad” y “para nosotros es la peor situación”.

Preguntado sobre el abono de los atrasos a los pensionistas derivado de la subida de pensiones del 1,6% aprobada en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2018, Granado señaló que se van a pagar “con independencia de cuándo se publiquen los Presupuestos” en el Boletín Oficial del Estado (BOE) para su entrada en vigor y se hará “en el plazo más breve posible”.

Insistió en que “no va a haber ningún retraso en la percepción de los atrasos para los pensionistas” y señaló que la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, ya dispone del calendario de pagos.

Por otra parte, el secretario de Estado quiso apuntar que “más de la mitad de nuestro déficit es por la reducción en los salarios”, por lo que concluyó que “el problema de la Seguridad Social no se arregla simplemente creando empleo, sino mejorando la calidad del empleo”.

En este sentido, advirtió de que “si seguimos creando empleos con infrasalarios, serán empleos con infracotizaciones y en esa situación, el déficit del Sistema se hará endémico”.

En este escenario, recordó el pacto suscrito entre empresarios y sindicatos para renovar el IV Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) y celebró que se haya alcanzado, puesto que con el salario mínimo en convenio de 1.000 euros mensuales “disminuirá notablemente la brecha salarial entre hombres y mujeres y el déficit de la Seguridad Social”.

Granado aplaudió que con este acuerdo, el Sistema contará con convenios que “van a garantizar la subida de las retribuciones de los trabajadores españoles”.

Respecto al destope de las bases máximas de cotización y de pensión, explicó que “hay un tope máximo de cotización, que es una situación que genera problemas al Sistema” porque fiscalmente convierte a la Seguridad Social en un sistema “muy inequitativo”. “La forma más razonable es ir creando un ámbito mayor de contribución, es un proceso que tenemos que hacer con mucho cuidado”.

Asimismo, aclaró que “no está en la agenda de este Gobierno incrementar los tipos de cotización”.

Por otra parte, manifestó que la cesión de la gestión de la Seguridad Social al País Vasco “sería una operación negativa” tanto para los potenciales beneficiarios como para los entregadores de la gestión. En su lugar, apostó por “progresar en muchísimas alternativas mucho más eficaces” que el traspaso.