Asimismo, consideran “necesario paralizar la tramitación del proyecto de ley” e indican que “nos gustaría exponerte personalmente algunas cuestiones en una reunión en la que podamos desarrollar nuestras inquietudes y presentarte nuestras propuestas para dotar a la Comunidad de Madrid del mejor ordenamiento urbanístico posible”.

Todo ello, añaden, “siempre dentro del consenso y la participación de todos los actores políticos y sociales que debe acompañar un proceso de estas características”.

Las organizaciones firmantes señalan que el texto “plantea entre otras muchas medidas la generalización de usos sobre el suelo no urbanizable, la posible legalización de muchas de las urbanizaciones ilegales con que cuenta nuestra comunidad, la simplificación de los trámites para reducir la protección de nuestro patrimonio cultural, la drástica reducción de las dotaciones necesarias para los nuevos desarrollos, lo que significará menos suelos para colegios, zonas verdes o infraestructuras, o la también radical reducción de la obligación de ceder suelos con reserva para vivienda con algún tipo de protección, llegando incluso a la desaparición de estas reservas para viviendas sociales”.

“Nos dirigimos a ti en este comienzo de tu mandato para transmitirte nuestra profunda preocupación por las circunstancias en que se está tramitando el proyecto de Ley de Urbanismo y Suelo de la Comunidad de Madrid”, señalan los firmantes de la misiva, que añaden que “durante la Presidencia de Cristina Cifuentes entró en la Cámara el texto de este proyecto, que desde un primer momento fue rechazado por una buena parte de nuestros representantes municipales, del tejido social madrileño, así como por los grupos parlamentarios Socialista y Podemos en la Asamblea de la Comunidad de Madrid”.

Asimismo, exponen que “la marcha de los trabajos de la ponencia encargada de examinar las casi mil enmiendas que se presentaron demuestra, día tras día, que en ningún caso la norma resultante contaría con el voto positivo de los grupos Socialista y Podemos”.

También destacan que “ello abocaría a la hipotética aprobación de una ley sin consenso y que solo contaría con la aceptación de la mitad más una de las personas representantes en la Asamblea de Madrid”.

A su juicio, “esta situación se alejaría de los compromisos de Cristina Cifuentes y de Jaime González Taboada, al inicio de la legislatura, cuando aseguraban que la ley alcanzaría un amplio consenso capaz de abordar los importantes retos territoriales a los que se enfrenta nuestra región”.

Asimismo, informan a Garrido de que el rechazo al texto normativo no solo se produce dentro de la Asamblea de Madrid, sino también en numerosos municipios.