Dependencia

Expertos piden al nuevo Gobierno más inversión en dependencia ahora que el ciclo económico es positivo

MADRID
SERVIMEDIA

Expertos en economía de la salud destacaron las políticas de atención a la dependencia como una "inversión en salud" e instaron al nuevo Gobierno a aprovechar el "nuevo ciclo económico" para incrementar los recursos para el desarrollo efectivo de la Ley de Dependencia, que "quedó aparcado con la crisis".

Así lo afirmaron durante las XXXVIII Jornadas de Economía de la Salud que se celebran esta semana en Las Palmas de Gran Canaria organizadas por AES (Asociación de Economía de la Salud), bajo el lema ‘Compartiendo decisiones: ¿Qué cambios se requieren?’.

Álvaro Hidalgo, investigador de la Universidad de Castilla-La Mancha, instó a “hacer un nuevo esfuerzo presupuestario” para la puesta en marcha “real” de la Ley de Dependencia, tras constatar que fue “una de las cosas que se llevó la crisis económica”.

A su juicio, se trata de una inversión, y no un gasto, que se hace en el presente pero tiene un “retorno social en el futuro”, al “disminuir la dependencia”. Asimismo, advirtió de que “la dependencia va asociada a la cronicidad y al envejecimiento”, y subrayó que habrá “muchísima” población de más de 65 años en 2050.

Por ello, recomendó inversiones en salud pública, en prevención y en los programas de educación en hábitos saludables, que permiten “retrasar” las enfermedades crónicas y disminuir la tasa de dependientes, objetivos que contribuyen por un lado a aumentar la calidad de vida y por otro a ayudar a que el sistema sea “sostenible”.

MENOS CUIDADOS INFORMALES

Otro de los factores de riesgo ligados a la gestión de la dependencia afecta a los denominados 'cuidados informales', aquellos que prestan familiares y allegados a personas en situación de dependencia y que se encuentran en riesgo debido a que las unidades familiares tienen cada vez menos miembros y a la profusión de hogares compuestos por personas solas.

Es un fenómeno asociado al envejecimiento de la población que han detectado investigadores como Fernando Sánchez, del departamento de Economía Aplicada de la Universidad de Murcia.

Señaló que en un contexto de envejecimiento de la población y de reducción del número de componentes de las unidades familiares, “cada vez menos personas estarán en condiciones de ser cuidadores informales” en “un futuro que no es que esté por llegar, sino que ya tenemos encima”, con “cada vez más personas solas”.

Por eso, Sánchez apuntó que “cada vez es más necesario” un apoyo institucional y el desarrollo de servicios públicos en estos campos, e instó a las comunidades autónomas a “plantearse” el “volver a reactivar” el gasto en dependencia para “dotar de más recursos” no sólo en lo estrictamente asistencial, sino también en aspectos como la atención domiciliaria o los centros de día.

SOLEDAD

Por otra parte, una reciente investigación del Grupo de I+D+i en Economía de la Salud de la Universidad de Cantabria (GIECONPSALUD) resalta la importancia de la soledad como nuevo riesgo asociado a las enfermedades crónicas, que ocasionan un 70% del gasto sanitario.

El trabajo, de David Cantarero, Marta Pascual y Carla Blázquez, demuestra que las personas con una mayor participación social tienen menor riesgo de padecimiento de múltiples enfermedades crónicas.

A través de un panel de datos de la Encuesta de Salud, Envejecimiento y Jubilación en Europa (SHARE), concluye que en los países del sur de Europa, como España e Italia, las personas mayores en hogares unipersonales tienen una probabilidad un 46% superior de padecer enfermedades crónicas que aquellas que no viven solas.

(SERVIMEDIA)
22 Jun 2018
AGQ/caa