Zapatero ha realizado importantes retoques en el Consejo de Ministros todos los años, con la única excepción de 2005. Llevó a cabo dos crisis de gobierno en 2006, dos en 2007, renovó el Ejecutivo en 2008 con motivo de las elecciones generales, aprobó otras dos reformas en 2009 y ahora ha realizado la última.

Zapatero arrancó la primera legislatura en abril de 2004 con 16 ministros: ocho mujeres y ocho hombres. Para su debut gubernamental escogió a María Teresa Fernández De la Vega, Pedro Solbes, Miguel Ángel Moratinos, Juan Fernando López Aguilar, José Bono, José Antonio Alonso, Magdalena Álvarez, María Jesús San Segundo, Jesús Caldera, José Montilla, Elena Espinosa, Jordi Sevilla, Carmen Calvo, Elena Salgado, Cristina Narbona y María Antonio Trujillo.

El 11 de abril de 2006 emprendió la primera modificación, forzada por la dimisión de José Bono como ministro de Defensa por supuestas razones personales. José Antonio Alonso se puso entonces al frente de los Ejércitos, Rubalcaba tomó el relevó de Alonso en Interior y, de paso, Mercedes Cabrera sucedió a San Segundo en Educación.

Cinco meses después, el 9 de septiembre de 2006, José Montilla dejó el Ministerio de Industria para ser candidato en las elecciones autonómicas de Cataluña. El hueco lo llenó el hasta entonces alcalde de Barcelona, Joan Clos. En total, cambiaron cuatro ministros en 2006. Hasta entonces, Zapatero había empleado 19 personas.

Mariano Fernández Bermejo fue el vigésimo ministro cuando en febrero de 2007 asumió el Ministerio de Justicia para que Juan Fernando López Aguilar encabezara la lista electoral del PSOE en Canarias. Tras los comicios, Zapatero llevó a cabo una remodelación más amplia en julio con tres nuevas caras: Carme Chacón entró en Vivienda, Bernat Soria llegó a Sanidad y César Antonio Molina aterrizó en Cultura. Además, Elena Salgado pasó de Sanidad a Administraciones Públicas. Resultado: cinco bailes de ministros en un mismo año.

En 2008 se celebraron las elecciones generales, así que Zapatero renovó el Gobierno tras los comicios con una nueva estructura y nuevos fichajes. Carme Chacón tomó el mando del Ministerio de Defensa, Celestino Corbacho sustituyó a Caldera en Trabajo e Inmigración, Miguel Sebastián entró en Industria y Beatriz Corredor se hizo cargo de Vivienda.

Asimismo, el presidente del Gobierno creó dos nuevos ministerios: el de Igualdad, que cayó en manos de Bibiana Aído; y el de Ciencia e Innovación, para el que llamó a la prestigiosa emprendedora Cristina Garmendia. Así que el inicio de legislatura conllevó seis modificaciones y un balance de 28 ministros en cuatro años.

El mayor número de cambios se produjo en 2009. Mariano Fernández Bermejo dejó el Gobierno en febrero tras el escándalo político que suscitó su participación en una cacería junto al juez Baltasar Garzón en Jaen, para la que no tenía licencia. Su puesto lo ocupó Francisco Caamaño.

Apenas mes y medio después, Zapatero procedió con una nueva crisis de gobierno, la séptima en cinco años. Quitó a Pedro Solbes, Magdalena Álvarez, Mercedes Cabrera, César Antonio Molina y Bernat Soria. Las caras nuevas fueron José Blanco, Manuel Chaves, Ángel Gabilondo, Ángeles González-Sinde y Trinidad Jiménez. Además, Salgado pasó de Administraciones Públicas a Economía.

La última remodelación, anunciada este mismo miércoles, ha pillado por sorpresa a todo el mundo, incluidos algunos de los cesados. De una tacada, Zapatero cambia seis carteras y da entrada a ministros nuevos como Ramón Jaúregui en Presidencia, Valeriano Gómez en Trabajo, Rosa Aguilar en Medio Ambiente y Leire Pajín en Sanidad. Con las nuevas incorporaciones, suman 38 ministros en los 78 meses que Zapatero lleva en La Moncloa. Si se hiciera medida, daría un cese de ministro cada dos meses.