Los socialistas explican que un grupo de militares de la guarnición de Barcelona creó en el verano de 1974 la UMD con el objetivo de propalar los valores democráticos y de justicia social en lo civil y militar y para “contrarrestar la voz” de quienes “continuaban defendiendo un modelo de ejército partidario del mantenimiento del régimen franquista y la falta de libertades”.

La UMD se autodisolvió el 26 de junio de 1977, tras las elecciones del día 15 de ese mismo mes. Antes de su disolución, se llevaron a cabo las detenciones de sus principales, nueve de los cuales se sometieron a juicio y fueron condenados a un total de 43 años de cárcel, además de, en muchos casos, su expulsión del ejército.

En 2003, el PSOE presentó una proposición no de ley “sobre la organización conocida como Unión Militar Democrática que se autodisolvió hace 25 años”, que no prosperó porque se opuso a ello la mayoría absoluta del PP. Finalmente, en 2009 sí prosperó una iniciativa similar impulsada por Izquierda Unida.

En diciembre de 2009, tuvo lugar una Declaración Institucional aprobada en Consejo de Ministros, de reconocimiento a miembros de las Fuerzas Armadas en la transición a la democracia, en la que se afirmaba que “es de justicia poner de manifiesto que los sacrificios personales y profesionales asumidos por los militares de la UMD, que arriesgaron su carrera y promoción profesional e incluso su libertad personal, son prueba manifiesta de su patriotismo, su alta conciencia democrática y su inquietud por contribuir a mejorar las Fuerzas Armadas, en el marco de la convivencia entre todos los españoles”.

En febrero de 2010, el Ministerio de Defensa concedió la Medalla al Mérito Militar a 14 jefes y oficiales miembros de la Unión Militar Democrática, que habían sido procesados en dos causas de rebelión militar. Entre los beneficiarios de esa medalla no se encontraba Juli Busquets, con quien, según los socialistas, España tiene una deuda.

Por todo ello, instan al Gobierno a otorgársela “por los sacrificios personales y profesionales asumidos al arriesgar su carrera y promoción profesional, e incluso su libertad personal, como prueba manifiesta de su alta conciencia democrática y su deseo de mejorar las Fuerzas Armadas, en el marco de la convivencia de todos los españoles”.

También solicitan dicha distinción al resto de jefes y oficiales miembros de la UMD procesados por rebelión militar y que todavía no la ostentan.