La dirección socialista dio el visto bueno a esta iniciativa legislativa que ha coordinado la secretaria de Igualdad del PSOE, Carmen Calvo, con la que quieren dejar claro la posición socialista para garantizar la igualdad entre hombres y mujeres en todos los aspectos de la vida, fruto del Consejo Asesor para las Políticas de Igualdad que se creó en septiembre.

De hecho, según apuntaron fuentes socialistas, esta proposición de Ley de Igualdad no será un asunto de “mínimos” sino una propuesta “ambiciosa” con la que el PSOE quiere ver quiénes son capaces de seguirles en esta apuesta por la igualdad.

Con las iniciativas anteriores en este campo, el PSOE busca el máximo apoyo y por eso sus propuestas, aseguran, eran de mínimos para garantizar aspectos de justicia y con el fin de que éstas puedan ser aprobadas cuanto antes.

En estas últimas semanas, el PSOE ha registrado la proposición de ley "para garantizar la igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres en materia retributiva”, para combatir la brecha salarial; así como la ‘proposición de ley de medidas urgentes para el desarrollo del pacto de Estado contra la violencia de género’. Con ella se da traslado a las medidas del acuerdo y se demanda que se apliquen los 200 millones comprometidos, después de esperar, dicen, la respuesta del Gobierno durante cinco meses.

La dirección socialista ha plasmado en estas iniciativas su propuesta política tras las reuniones con los agentes sociales. Tras la Ejecutiva, que estuvo flanqueada por dos carteles reivindicativos del sello feminista del PSOE, el secretario general, Pedro Sánchez, anunció que encabezará la “nutrida” representación de la Ejecutiva que participará en la manifestación convocada para el próximo 8 de marzo en Madrid con motivo del Día de la Mujer.

Sánchez recordó en rueda de prensa en Ferraz que la dirección socialista secunda el paro de dos horas convocado para reclamar los derechos de las mujeres. En este sentido, señaló que se suman a los paros, y no a la huelga general, porque se trata de una “reclamación justa laboral” que proponen los sindicatos UGT y CCOO, que “trasciende de las siglas”.

Así reconoció que fue “iluso” cuando llegó a pensar que esta cuestión por los derechos de las mujeres sería “compartida por las derechas”, ante las preguntas sobre las críticas de Ciudadanos y PP al manifiesto del movimiento feminista.