Así lo señaló durante la rueda de prensa para valorar el dato de crecimiento del PIB español en 2017, del 3,1%, en la que Garrido recordó que la incertidumbre creada en octubre por el proceso catalán llevó entonces al Gobierno a rebajar su previsión de crecimiento al 2,3%, pero que la aplicación del artículo 155 permitió “la normalización de las cosas”.

Garrido continuó en esta misma línea al afirmar que, en estos momentos, Cataluña necesita “un Gobierno estable, que respete el Estado de Derecho y con un presidente que pueda ejercer sus funciones”.

En cuanto a su influencia en la economía, Garrido aseguró que todos los datos relacionados con el consumo “son positivos” y que “si hay reducciones son puntuales y hay que mirar el conjunto del año”, para añadir que espera que el conflicto en Cataluña se resuelva pronto.

Así, explicó que el impacto de la situación catalana “está por medir aún” y que se están realizando estudios para medirlo “pero aún habrá que esperar” a los datos del INE por comunidades autónomas, que se publicará a finales de año.