Así se pronunció Zoido en la Línea de la Concepción (Cádiz), donde presidió una reunión con los principales mandos de la Guardia Civil y de la Policía Nacional de la comarca del Campo de Gibraltar, integrada por siete municipios: Algeciras, Los Barrios, La Línea, San Roque, Tarifa, Castellar y Jimena de la Frontera.

En la reunión se analizó el trabajo que desempeñan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y los datos de incautación de droga, que en el caso de Cádiz supuso el 40% del total aprehendido en España en 2016.

La situación geográfica de la comarca, las altas tasas de paro que alcanzan al 28% de la población, el desempleo juvenil que llega al 46,3% entre los jóvenes de 16 y 35 años y el abandono escolar han generado un caldo de cultivo propicio en el desarrollo de grupos y mafias que trafican con droga.

A pesar de esta situación, Zoido destacó que la “eficacia policial” supone un “importante freno” a estas mafias con la detención de sus principales cabecillas y la incautación de la droga. Prueba de ello, explicó el ministro, es que hace dos semana se dio uno de “los mayores golpes al narcotráfico” con la desarticulación y detención de uno de los “mayores capos” de la droga: José Ramón Prado Burgullo, alias 'Sito Miñanco', junto con otros 40 colaboradores suyos.

A su vez, destacó que la “eficaz labor policial” en la comarca del Campo de Gibraltar permite que la zona “haga de freno” a la entrada de hachís en Europa.

También puso de manifiesto que el “intenso control policial” que se ejerce sobre el tráfico marítimo en el puerto de Algeciras ha permitido que esta zona sea la que “mayor cantidad de cocaína incauta de España”.

Las incautaciones de cocaína en esta comarca han pasado de los 3.598 kilos a los 11.785 kilos, un 300% más con respecto a 2016, con 99 personas detenidas, de las que el 76,7% eran españoles y el resto de diferentes nacionalidades.

El método que sobresale en la introducción de esta droga es el denominado 'gancho ciego' o 'rip-off', que consiste en esconder la droga en el interior de un contenedor en el país de origen o en el puerto de trasbordo antes de su llegada al país de destino. Normalmente ni el remitente ni el destinatario son conscientes que el envío es utilizado para el tráfico ilegal de drogas.

En cuanto al hachís, la segunda de las drogas con más penetración en la comarca, el ministro anunció que se habían aprehendido en 2017 -también con cifras provisionales- un total de 145.372 kilos frente a los 100.423 kilos de 2016, lo que supone un incremento cercano al 45%, con 755 detenidos, de los que el 54,96% son españoles y el 37,74% son de nacionalidad marroquí.