El 57% de las mujeres han vivido situaciones de violencia sexual en espacios de ocio nocturno

- Según el IV Informe Anual del Observatorio Noctámbul@s

MADRID
SERVIMEDIA

El 57% de las mujeres han vivido alguna vez situaciones de violencia sexual normalizadas en espacios de ocio nocturno frente al 4% de los hombres, según los resultados de 1.400 encuestas 'online' realizadas por el Observatorio Noctámbul@s en su IV Informe 2016/2017 y dados a conocer este viernes por la Fundación Salud y Comunidad (FSC).

En declaraciones a Servimedia, la coordinadora del IV Informe, Ana Burgos García, indicó que “estas situaciones de violencia sexual normalizadas se refieren a tocamientos indeseados, comentarios incómodos o insistencias a una negativa. Este problema tiene una clara raíz de desigualdad de género que no hay que permitir”.

Esta es una de las conclusiones de este informe presentado por la FSC en el marco de la Jornada ‘Violencias sexuales, espacio público y ocio nocturno’, celebrada en la sede de la Delegación del Gobierno en Madrid.

De las encuestas llevadas a cabo entre jóvenes de 16 a 35 años de edad también se desprende que el alcohol es la sustancia más consumida en los espacios de ocio nocturno en un porcentaje idéntico del 69% tanto por chicas como por chicos. Sin embargo, según indicó Ana Burgos, “cuando el alcohol se consume de forma voluntaria por las mujeres se las criminaliza mientras que en los hombres funciona como un atenuante, ya que se suele decir eso de ‘como iba bebido no sabía lo que hacía’ y se reduce tanto la pena social como la legal”.

Otra de las conclusiones del informe del Observatorio Noctámbul@s subraya que uno de los lemas más difundidos como el ‘No es No’ ha demostrado que no es suficiente y “se queda corto porque parece que responsabiliza a las mujeres a decir que “no”. Para las mujeres en un contexto de desigualdad de género es muy difícil decir que “no” por miedo a su integridad personal y por los estigmas que existen cuando una mujer expresa su libertad sexual”, añadió la coordinadora del informe.

Además, esta encuesta también ha comprobado que los chicos tienen más dificultad que las chicas para percibir e identificar las vivencias sexuales que ocurren en su entorno. A esto se añade que la configuración urbanística del ocio nocturno genera miedo e inseguridad entre las mujeres que se ven obligadas a cambiar sus itinerarios desde estos espacios a su casa. Los transportes públicos tampoco son vividos como seguros por la mujer.

Por todo ello, “proponemos la creación de campañas y planes municipales en los que participen de forma activa la policía local y todos los agentes municipales para que esta violencia sexual se identifique, se sancione y se prevenga”, concluyó Ana Burgos.

(SERVIMEDIA)
16 Feb 2018
ABG/gja