Según informó el Ministerio de Asuntos Exteriores, la principal prioridad de la presidencia española será la lucha contra los tráficos ilícitos y su vinculación con el crimen organizado y el terrorismo.

Teniendo como referencia este marco, se abordará el tráfico de seres humanos, armas, drogas y bienes culturales. También se prestará atención al terrorismo, a la seguridad de las fronteras mediante el intercambio de información y al retorno de combatientes terroristas extranjeros. A su vez, se analizarán las ciberamenazas y los riesgos derivados de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación y los medios para hacerles frente.

Por su parte, España buscará la cooperación con otros organismos internacionales (UE, ONU, entre otras) y fomentará en las sesiones temáticas la participación de expertos y profesionales de las misiones sobre el terreno de la OSCE y de los socios de cooperación mediterráneos y asiáticos.

Además de presidir el Comité de Seguridad de la OSCE, España acogerá este año la Conferencia Mediterránea anual de esta organización, presidirá el Grupo de Amigos de Juventud y Seguridad y copresidirá junto con Bielorrusia el Grupo de Amigos de la Resolución 1540 del Consejo de Seguridad de la ONU.

La OSCE, con sede en Viena, es la mayor organización de seguridad regional del mundo. En ella están representados 57 países de Europa, América del Norte y Asia y aborda la seguridad de manera integral a través de sus tres dimensiones: la político-militar y de seguridad, la económica y medioambiental y la humana.

España presidió la OSCE en 2007 y ahora asumirá por primera vez los trabajos del Comité de Seguridad que se reúne con una periocidad mensual y en el que se preparan los documentos en materia de seguridad que se presentarán como resoluciones a ser adoptadas por los ministros de Asuntos Exteriores de los 57 países miembros en el Consejo Ministerial que tendrá lugar el próximo mes de diciembre en Milán (Italia).