Así lo recoge el último número del informe ‘Situación España’ presentado este martes en rueda de prensa por el economista jefe del Grupo BBVA, Jorge Sicilia, y el responsable de Análisis Macroeconómico de BBVA Research, Rafael Doménech.

Desde BBVA señalaron que su previsión sobre el crecimiento de la economía catalana en el último trimestre de 2017 se situaría en el 0,7%, una décima por debajo del cálculo para el conjunto de España.

En referencia al contexto político de Cataluña y su influencia en el ámbito económico, el estudio recoge que a pesar de su disminución desde los máximos alcanzados en octubre, “la incertidumbre política continúa y ha repercutido en algunas variables de la economía española”.

Así, el servicio de estudios de la entidad estima que la incertidumbre podría restar entre 0,1 y 0,3 puntos porcentuales al crecimiento del PIB catalán tanto en 2018 como en 2019, y que “si no se disipa favorablemente o se incrementa, podría llegar a tener un impacto más relevante sobre las decisiones económicas de empresas y familias”.

En este sentido, señala que “aunque los indicadores de empleo, producción y confianza han mantenido un tono relativamente positivo, se observa ya un impacto en los indicadores financieros” y señala que el efecto podría ser más evidente a partir del primer semestre de 2018, siendo mayor en Cataluña, donde indica que el impacto ya se nota en las cifras de gasto en consumo y turismo.

“En este contexto, los resultados tras la formación de gobierno serán claves”, añade el estudio en referencia a las distintas posibilidades para formar gobierno en Cataluña surgidas de las elecciones del pasado 21 de diciembre, aunque puntualiza que “por el momento el impacto parece limitado”.