"El acceso a alimentos, a agua y saneamiento, así como el cuidado de las heridas y lesiones que la tormenta ha causado en la población son las necesidades más inmediatas y necesarias para salvar vidas", aseguran ambas entidades, que destacaron que sus equipos en Mindanao "trabajan día y noche para evaluar la magnitud de los daños y las pérdidas causadas por esta tormenta" y en el caso de Unicef, anunció que ya estan "preparados para entregar suministros de agua, saneamiento e higiene en el momento en que sea demandado. Los suministros de agua y saneamiento que están preparados incluyen kits de agua para las familias, grandes vejigas de agua para uso comunitario, tabletas de purificación de agua, bidones y tiendas de campaña".

"Una de las mayores preocupaciones es la situación de los desplazados internos en los campamentos, las comunidades ya vulnerables por el conflicto de Marawi, que una vez más se han visto afectadas. Las tiendas fueron destruidas por los vientos y la lluvia y empujaron a las familias a buscar refugio en otro lugar", denuncian ambas ONG.

"Nuestro corazón está con los niños y las familias afectadas y vulnerables por la tormenta Tembin (Vinta) en esta época del año, cuando la mayoría de los filipinos se preparan para celebrar la Navidad. Unicef está preparada para apoyar al Gobierno y a los aliados para abordar los riesgos en la vida y la salud de los niños y aliviar el sufrimiento de las comunidades afectadas lo mejor que podamos ", dijo Lotta Sylwander, representante de esta ONG de la infancia en Filipinas.

"Puentes destrozados, redes de agua colapsadas, cientos de tiendas en las que vivían los desplazados de Marawi echadas abajo.... El Gobierno ha distribuido alimentos pero la gente pide desesperadamente material con el que protegerse de la lluvia y poder conservar una higiene mínima", reporta la primera evaluación de daños realizada por el equipo de Acción contra el hambre en Iligan, que se movilizó inmediatamente a la zona afectada.

"Hemos movilizado nuestro stock de emergencia en la isla y estamos preparando una respuesta inmediata para garantizar agua potable, distribuir lonas de plástico y material de refugio y utensilios para recoger agua y cocinar", explicó desde Madrid el responsable del equipo de emergencia de Acción contra el hambre, Víctor Velasco.

Nuestro equipo en Filipinas está también preocupado por los enormes daños en los cultivos: "se han perdido campos enteros de maíz, arroz y cocoteris y esto no afecta sólo a los agricultores sino también a los desplazados que trabajaban como jornaleros", agregó.