Cae en Almería una banda que prostituía a mujeres rusas captadas en las redes sociales

MADRID
SERVIMEDIA

La Policía Nacional ha desarticulado en El Ejido (Almería) una banda que se dedicaba a prostituir a mujeres de Rusia y Ucrania, con las que contactaban a través de las redes sociales y a las que atraían con falsas promesas de trabajo en España.

Según informó la Policía, la red estaba compuesta por tres hombres y dos mujeres. En el marco de esta operación han sido liberadas dos jóvenes que estaban siendo explotadas sexualmente por este grupo

Los detenidos, tras contactar con las víctimas a través de redes sociales rusas, las engañaban para que viajaran a España con falsas promesas de trabajo en establecimientos de hostelería. La trama organizaba todo el viaje y, una vez en España, informaba a las víctimas de que tenían que ejercer la prostitución y saldar una deuda contraída por un valor de 3.000 euros.

La investigación comenzó hace aproximadamente un año, cuando fue detectado un local de ocio en El Ejido que era gestionado por un grupo de personas que ya habían sido arrestadas por su vinculación con varios grupos dedicados a la trata de mujeres en el año 2014, en el marco de la investigación denominada ‘operación Búho’.

VISADOS DE TURISTA

Las pesquisas permitieron determinar que en este establecimiento había varias mujeres ejerciendo la prostitución y todas presentaban un perfil idéntico: eran jóvenes de Rusia o Ucrania y con visados de turista con una duración de tres meses de estancia.

La investigación se impulsó cuando los agentes localizaron a dos víctimas de trata de seres humanos, consiguiendo su liberación, además de ofrecerles todos los recursos y medidas de protección pertinentes.

A continuación se pudo determinar que la captación de las jóvenes se había realizado a través de varias redes sociales rusas utilizadas para publicar ofertas de empleo falsas. Los anuncios publicitaban que podrían compaginar unas vacaciones en España o en otros países turísticos con trabajos en negocios dedicados a la hostelería, ofreciéndolas con esta publicidad engañosa trabajo y diversión a la vez.

MULTAS SI NO OBEDECÍAN

Además de ofrecerles un empleo con un contrato de tres meses de duración, la organización tramitaba la obtención de visados y billetes del viaje. Una vez en España, las víctimas eran informadas de que habían contraído una deuda de 3.000 euros que saldarían en sus primeros días de trabajo y que tendrían que ejercer la prostitución en un local de alterne ubicado en El Ejido.

Seguidamente eran alojadas en pisos por grupos de seis o siete mujeres, siendo controlados sus movimientos en todo momento por miembros del grupo criminal, quienes no dudaban en amenazarlas o intimidarlas si no hacían lo que se les pedía.

Para tenerlas totalmente controladas, los detenidos implantaron un sistema de multas por diversos motivos para que la deuda contraída nunca terminara de saldarse y pasaban lista a diario para vigilar si estaban en los pisos. Los traslados del club a las viviendas se realizaban siempre en taxi para evitar que tuvieran algún contacto con terceras personas.

(SERVIMEDIA)
15 Dic 2017
NBC/caa