El banco y los sindicatos se reunieron este martes para proceder a la redacción final del principio de acuerdo alcanzado la semana pasada y proceder a su firma. Según explicaron en un comunicado CCOO, UGT, FITC y STS, han apoyado el acuerdo porque las medidas “reducen de manera muy significativa” la propuesta inicial planteada por el Santander. “El primer objetivo de la representación sindical que era minimizar la cifra final de puestos de trabajo a extinguir se ha cumplido”, destacaron.

El banco ha rebajado a 1.100 el número de trabajadores afectados por el ajuste de plantilla, un 25% sobre lo previsto inicialmente. Por su parte, se mantienen las 575 recolocaciones de trabajadores del Popular en otras sociedades del Grupo Santander.

Durante la negociación, la entidad había accedido a rebajar la cifra de trabajadores afectados por el ajuste de plantilla en varias ocasiones. La cifra inicial era de 1.585, aunque luego se bajó a 1.384 y a 1.200 en distintas reuniones, hasta la reducción a 1.100 acordada la semana pasada.

Además, la entidad accedió durante las negociaciones a igualar en este expediente las condiciones aplicadas en el ajuste de plantilla realizado en 2016 para el Centro Corporativo de Boadilla del Monte, tal y como reclamaban los sindicatos. Así, se recogen prejubilaciones a partir de los 50 años con un 80% del salario bruto pensionable.

Los trabajadores con 63 o más años tendrá derecho a una indemnización de 20 días por año trabajado, con un máximo de 12 mensualidades. Las prejubilaciones para los trabajadores entre 50 y 62 varían en función de la antigüedad del trabajador, aunque coinciden en el 80% del salario bruto pensionable. Hay, además, un convenio especial de aportaciones a la Seguridad Social hasta los 63 años.

En lo que se refiere a los trabajadores que no se podrán acoger a una prejubilación, el grupo ofrece una indemnización de 40 días por año trabajado con un máximo de 24 mensualidades, más primas de antigüedad que oscilan entre los 4.000 y 30.000 euros.

Los sindicatos defendieron que las extinciones se realizaran por el “camino de la voluntariedad”, y consideran que las condiciones acordadas “así lo facilitarán a través de prejubilaciones en su inmensa mayoría” para los mayores de 55 años.

Para los representantes de los trabajadores, este acuerdo recoge un “marco equilibrado”, que permite que el ajuste que provoca la integración del Popular se haga de manera “no traumática, primando la voluntariedad en las salidas y compensando éstas con recursos suficientes y adecuados”.

Los ámbitos afectados por el expediente de regulación de empleo serán en Banco Popular todos los servicios centrales en Madrid y A Coruña, Auditoría, Recuperaciones, Servicios Centralizados y Prevención de Riesgos Laborales.

En Banco Santander están afectados los Servicios Centrales de Madrid (Boadilla, Marpe, Mesena), Recuperaciones y UCR (Unidades de Control de Red) en diversas provincias de toda España.