Arrimadas realizó estas declaraciones en un desayuno informativo organizado por Europa Press, donde señaló las prioridades para “acabar con el ‘procés’” en Cataluña. Explicó que hay que iniciar una nueva etapa de optimismo en esta comunidad y realizar un plan de retorno para las empresas que han abandonado Cataluña. También demandó una auditoría del gasto de la Generalitat y exigió al resto de fuerzas políticas un pacto en el que se dé prioridad a las políticas sociales.

“Hay que rebatir intelectualmente a los partidos nacionalistas”, subrayó Arrimadas a escasas horas de que comience la campaña electoral en Cataluña. “A corto plazo no hay alternativa más allá de poder ganarles en las urnas el 21-D”, apuntó, para a renglón seguido asegurar que esta es la mejor manera para que “cambie” la sociedad catalana.

“SILENCIO ANTE EL INDEPENDENTISMO”

En este sentido, cargó contra el PSC y el PP y dijo que “en lugar de rebatir tesis, han salido a copiar a los nacionalistas y a pactar”. También se refirió a estos partidos al afirmar que “todos deberíamos asumir que el Gobierno de España ha cometido inmensos errores” -en alusión a todos los gobiernos y no sólo el del PP- en su relación con Cataluña, que se han puesto de perfil y ha habido “silencio ante las tesis rupturistas”.

“Si uno no rebate y no ilusiona, al final uno se despierta un día y ve que en una comunidad autónoma han declarado la independencia”, aseguro Arrimadas, quien criticó, además, que los miembros de Esquerra hayan estado instalados en el “cuanto peor, mejor”. “Nos han despojado de la autonomía y del autogobierno” y “ese oasis” que vendían a los catalanes “era mentira”, agregó.

En Cataluña, explicó la líder de Cs en este territorio, “necesitamos darnos la mano entre catalanes”. Dijo que si es elegida presidenta de la Generalitat, se reunirá en primera instancia con el presidente del Gobierno central, Mariano Rajoy, y aseguró que se compromete a incorporar a su nuevo Gobierno a profesionales del sector público y privado “para gestionar mejor Cataluña”.

Pidió rebajar el tono y gobernar desde el respeto tras años de “sufrimiento” de las tesis independentistas. “A corto plazo no se me ocurre una opción diferente a la de gobernar partidos diferentes”, porque “si vuelven a gobernar (PDeCat y ERC) van a volver a hacer lo mismo y Cataluña no aguanta cuatro años más del ‘procés’”.

Defendió una “alternativa constitucionalista” en Cataluña, que hay que construir tras el 21 de diciembre “si dan los números” y si Ciudadanos se sitúa como el partido constitucionalista con más votos en estas elecciones. “No nos perdonarían que, si ganamos en votos y en escaños, no nos pongamos de acuerdo. Me parecería un despropósito”, precisó la candidata a la Presidencia de la Generalitat catalana.

EL “SARAMPIÓN” DE LA GLOBALIZACIÓN

Por su parte, el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, aseguró en la presentación de Arrimadas que el nacionalismo es “la otra cara del populismo” y “el sarampión de la globalización”, porque intenta volver al pasado y dividir a la sociedad.

El líder de la formación naranja explicó que en estos comicios “nos jugamos la unión de los españoles y la de los catalanes”, por lo que el 21-D Arrimadas debe ganar las elecciones “por el bien de España y de Europa”.

Los liberales “tenemos mejores políticas que los populistas”, reivindicó, y defendió que en la construcción de un proyecto dirigido a una mayoría de españoles, Arrimadas “va a ser sin duda una de las políticas más importantes de este país”. “En Cataluña, si nos movilizamos todos, tendremos una presidenta como Inés capaz de llegar a acuerdos con todos”, concluyó Rivera.