El estudio delata la muerte de más de diez millones de vertebrados al ao en todas las calzadas del Estado, sobresaliendo la incidencia que este fenómeno tiene en esos 21 puntos.

Los conservacionistas recogieron los cadáveres de 7.612 anfibios, la gran mayoría sapos comunes; 1.796 reptiles, destacando el camaleón y diversos tipos de culebras y víboras; 10.288 aves, entre las que había cernícalos, faisanes y, sobre todo, gorriones, y una importante variedad de mamíferos, desde liebres hasta lobos, pasando por caballos e incluso algún lince.

PERROS Y GATOS

Entre los amíferos llama, además, la atención el importante número de perros y gatos domésticos hallados, 1.322 y 1.764, respectivamente, así como la de especies en peligro de extinción.

Aunque los autores del informe reconocen que es "prácticamente imposible" abarcar todas las carreteras del país, insisten en que este es el trabajo más ambicioso que se ha realizado tanto dentro como fuera de España y aseguran que sus conclusiones y apreciaciones son "de absoluta fiabilidad e incluso tienden a la baja".

Lo puntos negros están localizados en Orense, principalmente en el tramo de la carretera nacional 120 comprendido entre la capital y Penalba, donde cada mes mueren varios miles de anfibios.

Los anfibios son también las principales víctimas en Monfragüe (Cáceres) y en Badajoz, en las inmediaciones del Puerto de Las Marismas.

Dos de los puntos más importantes están registrados en la carretera que une las localidades onubenses de El Rocío y Matalascañas, en el Parque Nacional de Doñana, y la nacional 32 a su paso por las salinas de Santa Pola (Alicante).

En el Parque Nacional de Doñana, la Coda mantiene que la exigua población de lince ibérico que habita ese entorno sufre el problema, mientras que en la nacional 332 todos los años son atropellados unos 3.000 vertebrados, siendo las especies más afectadas el flamenco y el murciélago.

Huelva es una de las provincias más castigadas por este fenómeno. En las cercanías de Ayamonte y la capital fallece masivamente el camaleón, que también sufre lasconsecuencias del tráfico rodado en el litoral malagueño y gaditano.

OTROS PUNTOS NEGROS

En Córdoba, las inmediaciones del embalse de Peñaflor presenta problemas graves, mientras que en las salinas de San Pedro del Pinatar (Murcia) las poblaciones de aves limícolas se ven seriamente afectadas.

La autopista de Levante, a su paso por Castellón y Cataluña, registra dos puntos negros para el sapo común y la garza, a la altura de las localidades de Peñíscola y Benicarló y del delta del Ebro, respectvamente.

Madrid es una de las comunidades que registra un mayor índice de atropellos, a pesar de que sólo presenta un punto negro en la carretera C-501, entre Chapinera y Brunete, donde anualmente mueren un importante número de conejos.

Finalmente, las poblaciones de ciervos, corzos y zorros de los Picos de Urbión, en la provincia soriana, son también víctimas de la acción destructiva de los vehículos.

SOLUCIONES

Como soluciones, los autores del informe proponen la construcción de pasos eseciales para los animales en los puntos más conflictivos y el establecimiento de señales reflectantes que avisen del peligro a los propios animales.

Además, insisten en la necesidad de reducir la velocidad y densidad del tráfico en algunos tramos y la de instalar nuevas señalizaciones que avisen a los automovilistas del peligro.

Los conservacionistas tienen previsto realizar diversas movilizaciones durante las próximas semanas y no descartan la posibilidad de elevar una denuncia ante la CE contrael Gobierno español, por considerar que no adopta las medidas adecuadas para solucionar el problema.