Zubimendi realizó estas declaraciones en las inmediaciones del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, donde iba a ser juzgado hoy por su negativa a cumplir el servicio militar y la prestación social sutitutoria, delito por el que el fiscal ha solicitado una pena de dos años, cuatro meses y un día de prisión y dos años de inhabilitación absoluta.

El juicio, sin embargo, no pudo celebrarse. Mikel Zubimendi se acercó hasta el edificio donde está situdo el Tribunal Superior con la única intención de hacer declaraciones a los periodistas y abandonó posteriormente el lugar diciendo que tenía que ir a "trabajar".

El parlamentario de HB dijo que la actitud que está adoptando es "coherente" con sus planteamientos a favor de la insumisión, argumentando que esa desobediencia tiene que llegar "hasta los mismos morros de la justicia del lazo azul que perpetúa un secuestro legal y ante un juez que seguramente portará el lazo azul".

En el mismo tono, Zuimendi añadió que "ahora que se habla tanto de secuestros, se sigue permitiendo el secuestro y la extorsión a la que está sometida la juventud vasca, y nadie se pone lazos azules, aunque algunos jóvenes mueran en la 'mili' y otros tengan que alejarse de sus familias en contra de su voluntad".

Ante la ausencia del inculpado, el Tribunal decidió suspender la vista oral prevista para hoy y tomarse un periodo de tiempo para convocar la nueva fecha del juicio, así como para estudiar las medidas que se adoparán para evitar que el parlamentario de HB eluda nuevamente la comparecencia.

Dada su condición de persona aforada, por su cargo de parlamentario vasco, Zubimendi sólo puede ser detenido, según explicó su abogada, en el caso de ser sorprendido en el mismo momento en el que comete un delito, una situación que pudo producirse hoy si el tribunal hubiese sabido a tiempo que Zubimendi no iba a presentarse en la sala.