Zaplana declaró en rueda de prensa que "no tiene ningún sentido" que desde el PSOE se critique un día a un "socialista histórico" como Enrique Múgica, otro a Nicolás Redondo Terreros y otro a Rosa Díaz, sin tener en cuenta, añadió, "las cosas que va diciendo por ahí de Bono" tras su rechazo a ser candidato a la Alcaldía de Madrid.

Además, criticó que el Gobierno permita esta "barra libre" contra figuras como el Defensor del Pueblo, puesto que el PSOE facilitó en la Mesa del Congreso que prosperase la reprobación contra Múgica, y advirtió de que sólo sirve para "minar la confianza en esa institución".

Zaplana denunció la diferente manera de actuar del PSOE en el Gobierno y en la oposición, ya que cuando el Defensor del Pueblo anunció en 2001 un recurso de inconstitucionalidad contra la Ley de Extranjería que aprobó el Gobierno de Aznar, el actual portavoz socialista en el Congreso, Diego López Garrido, comentó que "no tenía el derecho a recurrir, sino la obligación de hacerlo".