El secretario general del Partido Socialista prosigue con la agenda de trabajo que ha marcado la meta final de "alcazar la esperanza de 2004", a la que aludió en la clausura del XXXV Congreso del PSOE.

"Aunque es mi intención obtener la confianza de los compañeros, el partido todavía no han nominado candidato" porque "aún faltan tres años" para las elecciones, añadió Zapatero.

El líder del PSOE se mostró convencido de que "la esperanza de 2004 está claramente más cerca que hace un año" y, añadió, que "puede ganar las próximas elecciones generales".

Zapatero insistió en la necesidad de no adelantar acontecmientos y realizar una "oposición útil" para modernizar a fondo la estructura del PSOE para convertirlo en un partido "de los ciudadanos" y definir las bases ideológicas del Partido Socialista para "protagonizar un nuevo salto de modernización".