Rodríguez Zapatero participó en Madrid en un acto bajo el lema "Una vida sin violencia: un derecho de las mujeres", que conó también con actuaciones teatrales y musicales contra los malos tratos.

El líder socialista aseguró que la violencia contra las mujeres es el mayor ataque a lo más profundo e íntimo de la convivencia en democracia y su erradicación exige una tarea diaria y cotidiana de toda la ciudadanía.

Por ello, juzgó imprescindible una ley integral que multiplique las acciones preventivas, eliminando todo residuo de machismo en todos los ámbitos de a convivencia y que refuerce la protección social y laboraltodas las víctimas. Pero, junto a esa ley, juzgó también necesaria la extensión de los valores de tolerancia.

Invitó a los poderes públicos a contribuir a esta tarea, y recordó especialmente al poder judicial que sus sentencias son la voz de la justicia y, por tanto, de los más débiles de una sociedad. "No podemos callarnos ante determinadas sentencias", recalcó.

Al Gobierno le exigió también que trabaje a fondo contra la lacra de la violencia domestica, y se comprometió a luchar cada día para cnseguir una ley integral que aborde este problema. "La primera ley que envíe al Parlamento será contra la violencia de género", prometió Zapatero, quien advirtió, no obstante, que en su aplicación deberá comprometerse toda la sociedad.