Rodríguez Zapatero respondió en la sesión de control al Gobierno en el Senado a una pregunta del portavoz del PNV, Joseba Zubía, que expresó sus temores sobre el futuro del concierto a la vista de esa "arremetida".

En un primer momento, el presidente se limitó a decir que el concierto goza del "máximo nivel de protección" consagrado en la Constitución y "no sufre agresiones", al menos por parte del Gobierno central.

Rodríguez Zapatero aseguró que no ve "ningún riesgo o situación que pudiera parecerse a un vaciamiento" del concierto, por lo que no contempla medidas para incrementar su protección, más allá de respetar la legislación y cumplir las resoluciones judiciales.

Pero Zubía denunció a continuación "la demagogia, el oportunismo y las afirmaciones gratuitas" sobre el concierto en el mundo político y ante las negociaciones del nuevo sistema de financiación autonómica.

Se trata, en su opinión, de una estrategia concebida para crear un estado de opinión "predispuesto en contra" del concierto y presentar a los vascos como "privilegiados e insolidarios".

Zubía alertó de que el PNV no está dispuesto a aceptar esa situación porque el concierto es un sistema "evidentemente específico pero respetuoso y solidario con el conjunto del Estado".

"ACOSO PERMANENTE"

En el ámbito judicial, denunció, "la demagogia y oportunismo táctico es todavía mayor", llegando a un "cuestionamiento y acoso permanente" al sistema tributario foral derivado del concierto económico mediante sentencias y recursos contra la normativa tributaria vasca.

Se trata, sentenció, de toda una "arremetida" judicial, demostración de que los tribunales "olvidan" que el concierto implica un sistema tributario propio y de que "no se quiere admitir" la existencia de cinco haciendas con capacidad normativa, cuatro regímenes forales y uno común para el resto.

Zubía dijo al presidente que todo ello supone "un ataque frontal" a la esencia del autogobierno vasco, que no puede estar a expensas de intereses y rivalidades políticas.

Le pidió por ello al presidente "que no calle" y que haga un pronunciamiento expreso de defensa del concierto vasco, porque los silencios "en ocasiones pueden parecer cómplices".

Rodríguez Zapatero expresó a continuación su compromiso expreso con la defensa del concierto vasco como institución constitucional en todo lo que sea posible dentro de las competencias del Gobierno.

Aseguró que su voluntad quedará clara con la renovación del cupo, que debe acometerse este año, y que estará abierto a "sugerencias e iniciativas" después de escuchar las reflexiones del senador peneuvista.