Durante una entrevista a la Cadena Ser, recogida por Servimedia, Zapatero vaticinó que 2009 va a ser "difícil" en términos económicos pero se mostró convencido de que el contexto internacional se podrá "remontar" en los últimos meses del año.

Zapatero destacó que las familias españolas ya tienen una situación "más desahogada" que el año pasado gracias a la bajada del precio del petróleo y al descenso de los tipos de interés, que han reducido las cuotas hipotecarias a través del euríbor.

Gracias a ello y a algunas de las medidas adoptadas por el Gobierno, destacó que los ciudadanos "van a tener más disponibilidad" que hasta ahora y les invitó a aumentar su consumo para contribuir a la recuperación de la economía.

Zapatero volvió a achacar la crisis a la situación financiera internacional. En este sentido, explicó que la construcción de automóviles en España ha caído porque el 84% de las unidades que se fabrican aquí se venden en otros países y que el turismo también ha registrado "ratios más bajos".

Pese a todo, reconoció que el "principal problema" de España es el aumento del desempleo y por eso lo fijó al mismo tiempo como su "prioridad" para los próximos meses. Vaticinó que el Fondo de Inversión Local aprobado por el Ejecutivo permitirá crear en ls próximos meses unos "250.000 empleos directos y algunos más indirectos".

Zapatero prometió trabajar "para que no se produzca" una cifra de paro de 4 millones de personas, aunque dudó de que pueda alcanzarse porque "no es lo mismo 3 millones de parados cuando tenemos 20 millones de personas trabajando que cuando teníamos 15 millones".

"SOLBES NO ES PESIMISTA"

El presidente del Gobierno salió también en defensa del ministro de Economía, Pedro Solbes, tras presentar el viernes las previsiones económicas para 2009, que contemplan un déficit del 5,8%, una recesión del 1,6% y un paro del 15,9%.

"Solbes no es pesimista sino, como es bien conocido, estaría haciendo otras muchas cosas. Él está por sentido de la responsabilidad, si algo caracteriza a Solbes es la solvencia y la seriedad", dijo.

Zapatero señaló el ministro de Economía "es muy importante" para el Gobierno porque aporta una "solvencia" y una "seguridad" ante operadores económicos, ante los inversores y ante la Unión Europea.

Finalmente, el presidente reiteró su intención de reunirse con los dirigentes de los principales bancos de España este mismo mes con el fin de "evaluar la situación" económica y "pedir que agilicen más" la concesión de crédito a los ciudadanos.