Rodríguez Zapatero tuvo una clara referencia a este asunto durante un acto con más de 7.000 agricultores y ganaderos gallegos congregados a las afueras de Santiago de Compostela y en el que arropó al candidato socialista a la Presidencia de la Xunta, Emilio Pérez Touriño.

Se trata de las primeras palabras del presidente del Gobierno después de que el PSOE presentara una propuesta de resolución tras el Debate sobre el Estado de la Nación en la que recupera la letra del Pacto de Ajuria Enea para defender el final dialogado de la violencia, en un texto que coincide en este punto con otro presentado por el PNV.

Una vez que el PP ha anunciado su oposición frontal a esta propuesta, el presidente subrayó que desde el primer día al frente del Gobierno ha defendido la paz "en el mundo y dentro de España".

"Hoy España es un país que defiende la paz en el mundo, y este Gobierno, con todos los españoles, trabaja por la paz y por terminar con el terrorismo en España. Por eso trabajamos cada día", reiteró Rodríguez Zapatero.

El presidente recordó a los ciudadanos que para lograr ese objetivo "es buena la ayuda de todos los partidos", y que él, como líder de la oposición, apoyó "en todo y cada día" al Gobierno del PP en la lucha contra el terrorismo.

"Ahora, a pesar de lo que está haciendo", dijo, en referencia a ese mismo partido, el PP, "seguiré trabajando por la unidad de todos los partidos y por la paz y por el final de la violencia en España, que es lo que quieren los vascos y todos los españoles".

Al comienzo de su intervención, el presidente explicó con ironía a los asistentes que hay quien le critica por ser optimista pero, pese a ello, "no me engancho al pesimismo del PP y del señor Rajoy".