Durante su intervención en el Congreso de los Diputados, Zapatero insistió en que los bancos tienen "mucha más dificultad y les cuesta mucho más obtener los recursos para financiar y dar más crédito a familias y empresas".

En este sentido, el líder del Ejecutivo volvió a dar la cara por la banca y señaló que "en una situación de crisis económica, con una caída de la demanda, tienen a mantener una actitud muy conservadora, es así".

El presidente del Gobierno reconoció que hoy el crédito es "más difícil" y las condiciones "son peores", se piden avales, se tarda más tiempo en obtener respuesta y se conceden por menos tiempo.

"Y qué hace el Gobierno", aseveró Zapatero, "dialogar con la banca" y pedir a las entidades financieras que hagan "el máximo esfuerzo".

El líder del Ejecutivo añadió que las medidas puestas en marcha por el Gobierno, como el sistema de avales o las líneas ICO, responden a la idea de que "sabemos que va a tardar un tiempo en que se recupere el crédito".

Sobre el Fondo de Adquisición de Activos Financieros, Zapatero aseguró que el rendimiento que sacará el Gobierno será "positivo". "No hagamos demagogia, seamos fieles a la verdad", insistió el presidente del Ejecutivo, quien afirmó que el impacto sobre el erario público será positivo, "porque no se han inyectado ni se está dando dinero público a la banca. Sencillamente es falso".

En cuanto a la posibilidad de crear un banco público que dé créditos directamente a ciudadanos y empresas, Zapatero pidió a los portavoces que "reflexionen" si realmente quieren que "sean los funcionarios públicos los que digan si dan o no un crédito" y que los ciudadanos asuman todo el riesgo de prestar a empresas.

Por el modelo que tenemos, dijo el presidente, con las líneas de préstamos del Instituto de Crédito Oficial (ICO) "compartimos riegos con las entidades". Con las líneas del ICO "muchas veces los bancos corren un riesgo porque una parte del crédito no se va a devolver".