ZAPATERO CONSIDERA ARREBATADA AL PP LA BANDERA DE LA GESTION ECONOMICA UN AÑO DESPUES DE LLEGAR AL GOBIERNO
- Reitera que el PP es esencial en la reforma constitucional y ofrece consenso para estabilizar la educación
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El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, considera que un año de gestión ha sido suficiente para demostrar la capacidad de los socialistas para gestionar la economía, desmintiendo los augurios de quienes señalaban el crecimiento como el mayor fracaso del PSOE.
Zapatero reunió en el Congreso de los Diputados a todos los parlamentarios socialistas para hacer un exhaustivo balance de su primer año de gestión y exponer las prioridades inmediatas, en una intervención que se prolongó durante más de una hora.
El balance es que la tarea desarrollada desde la victoria electoral "ha merecido la pena" porque un año después "las cosas han mejorado en España, ha habido cambio de políticas, tenemos un horizonte favorable en términos económicos, sociales y territoriales".
"Estamos haciendo el cambio. Para eso sirven los votos que los españoles dan a los socialistas", dijo Rodríguez Zapatero, en su exposición de un año de Gobierno pero también cuatro días antes de las elecciones autonómicas en el País Vasco.
La tarea de los socialistas, dijo a todos ellos, es "seguir escuchando, mantener el principio del diálogo y del respeto aunque a veces haya críticas que podamos considerar injustas", y en su caso, "asumirlas con deportividad, o con talante, y no tener inconveniente en rectificar cuando sea menester, como hemos hecho".
Con datos de crecimiento, indicadores de actividad, de afiliación a la Seguridad Social y de empleo, sentenció que existen "condiciones adecuadas para decir que la economía mejora, ha mejorado y tenemos el firme convencimiento de que será así todo 2005", lo mismo ocurre con el empleo, y, si fructifica el diálogo social, mejorará la contratación indefinida y la reducción de la precariedad.
A ello contribuirá también el plan de dinamización puesto en marcha, junto con el de fomento empresarial, la reforma fiscal, y la adecuación de España a los objetivos de Lisboa con "el mayor esfuerzo de la Historia" en I+D+I.
La politica económica del Gobierno, sentenció, "está dando buenos frutos", siempre inspirada en el principio de estabilidad presupuestaria. España, añadió, está en condiciones de cumplir el objetivo de acabar el año con un superávit real del 0,1 por ciento del PIB.
Además, el Gobierno "no ha mirado para otro lado ni ha dejado que los problemas se pudrieran más", sino que ha solventado situaciones como la de Izar o la de ratificación de Kioto pese a la "ausencia de trabajos previos".
POLITICAS SOCIALES
Estas buenas perspectivas en materia económica no han impedido, sino más bien al contrario, destacó Rodríguez Zapatero, el impulso de políticas sociales concretas, como el incremento de pensiones, becas, salario mínimo, o el incremento de plantilla de fuerzas de seguridad.
La extensión de los derechos individuales y de ciudadanía ha sido otra prioridad del Ejecutivo, así como el cambio de rumbo en la política exterior, para centrarla en la defensa de la paz y la cooperación.
También aquí pese a las críticas y los augurios, el presidente sentenció que esa política "ha fortalecido enormemente la posición de España en el mundo", y hoy existen "las mejores relaciones que se pueden tener" con los tres vecinos: Francia, Portugal y Marruecos". "Quizá algunos por mirar demasiado lejos se olvidaron de que lo importante está cerca", añadió.
También se refirió a la política de vivienda, aunque sin ninguna mención a la polémica suscitada por la ministra de construir viviendas protegidas de treinta metros cuadrados para los jóvenes.
El presidente prefirió subrayar la gran responsabilidad que asumió el Gobierno con la creación del Ministerio, y las cesiones de suelo público ya ejecutadas y proyectadas, que han permitido ya hacer espacio para 28.000 viviendas, junto a las 109.730 personas que han recibido algún tipo de ayuda.
DIALOGO TERRITORIAL
Otra de las materias abordadas por el presidente fue el regreso del diálogo a la política territorial. "Volvió a existir un Gobierno abierto, que sabe que para que España mejore tiene que hacerlo con todas las comunidades autónomas", afirmó.
Desde el comienzo. aseguró, las puertas de Moncloa han estado abiertas a todas las comunidades "sin distinción de colores políticos", con la premisa de que "no se puede gobernar España sin contar con ellas, y menos contra ellas".
Casi al final de su intervención, el presidente defendió como "acertado" el método de consulta al Consejo de Estado para iniciar la reforma de la Constitución, un proceso "que exige sosiego, estudio, profesionalidad técnica y voluntad política".
El Gobierno, aseguró, tiene la voluntad política, y confía en que el Consejo de Estado aporte "sabiduría, camino y cauce técnico" para abordar esa reforma. Además, es consciente de que es necesario el respaldo de la "amplia mayoría" del Parlamento.
Por ello, pese a que "algunos grupos tienen dificultades siempre que se habla de reformas", expresó su voluntad de diálogo con todas las fuerzas políticas para alcanzar "el máximo consenso".
En este sentido, recordó que el Gobierno "ha dado por bueno" el proceso de reformas estatutarias con un doble objetivo, desarrollar el autogobienro y mejorar los mecanismos de cohesión y solidaridad.
El compromiso del Gobierno en este sentido, es lograr un gran acuerdo con todos los partidos y todas las comunidades autónomas para cerrar un modelo de financiación que aborde las necesidades de todos los territorios, especialmente en el ámbito de la sanidad.
La voluntad de consenso con el PP la hizo expresamente extensiva al hablar del proyecto de reforma educativa. Aseguró que está dispuesto a tomarse "todo el tiempo necesario" para llegar a un acuerdo que garantice la estabilidad futura del marco educativo.
Confió también en que todos estén "a la altura de la responsabilidad" necesaria para que ese marco dure "un tiempo amplio" y no se acometan sucesivas reformas parciales en función de las mayorías parlamentarias.
La transparencia de la acción política como método para lograr un mayor respeto y confianza de los ciudadanos hacia sus dirigentes fue otro de los logros señalados por Rodríguez Zapatero, con especial mención a unos medios de comunicación públicos "independientes y plurales" y a un Parlamento que ha recobrado vigor y también "dignidad estética".
Todo ello hace concluir al presidente que la tarea desarrollada durante este primer año de Gobierno "ha merecido la pena" y demuestra, sobre todo, "que lo mejor está por venir".
(SERVIMEDIA)
13 Abr 2005
CLC